La toma de Caracas
En la historia universal hay muchos ejemplos simbólicos que reflejan la decisión de una nación y de un pueblo, de generar acciones de masa que promuevan o propicien un cambio.
La toma de la Bastilla, el 14 de julio de 1789, es un ejemplo notorio del inicio de un cambio trascendental: el fin del absolutismo monárquico y el surgimiento de la República Francesa.
Otro episodio fundamental para el cambio fue la marcha sobre Washington por el trabajo y la libertad, el 28 de agosto de 1963, que culminó con el famoso «Yo tengo un sueño», de Martin Luther King.
La caída del muro de Berlín, el 9 de noviembre de 1989, puso el punto final a la cortina de hierro que había impuesto el comunismo soviético.
La revolución naranja, que entre los años 2004 y 2005, movilizó a los ucranianos en Kiev en desobediencia civil contra el fraude electoral generado por el gobierno.
La toma de Caracas, el 1 de septiembre de 2016, será una fecha importante en la historia de Venezuela, porque señalará al mundo y al resto del país, que esta ciudad será nuevamente ejemplo de lucha, para lograr la libertad de todos los venezolanos y el retorno a una auténtica democracia.
