¡La ensalada jurídica de Tibisay!
Habíamos preparado el título “La rectora Socorro”, pero luego de oír a Tibisay Lucena, no nos queda más remedio que cambiar de brújula e inclusive de mapa, porque cada vez que un “chavista” habla, es como si una boa emitirá un vaho, del que no podemos apreciar su pestilencia, porque para ellos no existe el temor al efluvio. Todos sabemos, que es un respiro contradictorio, que busca percibir el máximo de oxígeno para la sobrevivencia en este mundo de diáspora en que han logrado convertir a la que antes fue una de las más pujantes potencias culturales y democráticas de América y del mundo.
No de otra forma podemos percibir ni descifrar el conflicto moral desarrollado en la mente de quienes creyeron y juraron, que habían endiosado y amado al salvador de una “nueva patria”, trajinada, postergada o blasfemada por la “derecha arcaica y burguesa”, siguiendo órdenes del “imperio”. Ese, que siempre invocan como el poderoso mago, que es capaz de “torcer” los deseos de los pensadores “puros y socialistas”. ¡No Tibisay!, tú no eres de marte, ni ninguno de tus compinches pueden liberarse de la culpa forjadora de esta desvergüenza que pudiéramos llamar, “la Venezuela socialista del siglo xxi”. ¿O es que acaso necesitaron aporte externo para proveer las “bondades” que hoy tenemos como aporte social y económico? Bueno, no excluimos sus congéneres de los chulos del ALBA y Petrocaribe, quienes, sin durante la era de la chequera que caminaba por América latina y por todo el mundo, dispensando las bondades del mayor “parlanchín de América”, que los embobó a todos ustedes con su melancólico “por ahora”. Dios nos cuide, que algunos de ustedes puedan continuar su obra, que pareciera no haber calado en ustedes, ni en su flamante aristocracia. ¡Si, aristocracia!, aunque burda, marginal e ignorante.
Te oímos Tibisay. ¡Qué descaro! No solo funges de embustera, golosa y prosaica, sino que te echas de sabia y pitonisa, pero cometes el error, de echarte también de versada jurista y proyectista programadora, que interpreta la ciencia a tu sola creencia y convicción, que no solo está amañada y desviada, sino que intentas desvirtuar la verdad verdadera, como decimos los juristas, sino que atinas a desvirtuar la verdad jurídica, interpretando a tu manera la ley y la Constitución. Partes, en la demostración de tu tesis anti revocatorio, de demostrar e interpretar lapsos y tiempos tomados a tu manera. Para ti Tiby, tu reglamento, manipulado en su momento para beneficia a tu “benefactor eterno” por tu mentor Jorge Rodríguez, quien no quiere entender, que ha sido contagiado por sus pacientes clínicos, quien como el difunto Chirinos, de loqueros pasaron a ser desvergonzados políticos. ¡Que Dios los perdone en el cielo y en la tierra! No Tiby, la ciencia es ciencia porque se demostró la verdad de sus hipótesis y ella establece sus métodos. No es dable y muchos menos aceptable, que tú y tus compinches “comadres” acomoden los tiempos necesarios para ejecutar el referendo revocatorio de Maduro, adaptándolos para que no se efectúe este año, pensando con la malignidad de dar permanencia al mantenimiento de este régimen más allá de lo que el pueblo quiere: ¡Salida ya! No es que vamos a cambiar de malo a bueno al día siguiente, porque la malignidad creada por el perverso y ustedes, es de magnitud inmedible, como lo fue impensada, pero la tenemos. ¡Un pueblo hambriento que muere por falta de comida y medicinas!
¿Cómo puedes tú Tibisay, pensar, que tienen que considerar “el derecho de ambas parte” revocante y revocado? ¿Puedes tú indicar, en que ley se da derecho a un mandatario para oponerse al mandante? ¡No Tibysay, Maduro es un empleado público, que puede ser revocado o destituido, solo con la disposición de quien le dio el mandato: “el pueblo”! El establecer que el revocatorio sea si se obtiene un voto más que los obtenidos en su mandato, es la forma de medir la magnitud de los mandatarios, no como tu piensas que es para medir la legitimación del mandato en la elección presidencial, sino para verificar que el mismo mantiene su legitimidad. Obvio, queda clara la idea de que se quiere hacer valer, no el derecho del presidente, sino de la mayoría que votó por él. ¡Es necio especular sobre lo que sobre este derecho ocurre! Las encuestas indican, la reversión del interés del voto del pueblo. Se demuestra, que si el pueblo se equivoca, tiene el derecho a rectifica y es lo que quiere hacer con el REVOCATORIO.
Tibisay Lucena debe entender, sin mucho esfuerzo intelectual, que la Constitución establece este derecho del pueblo para rectificar en su error, que en su momento consideró su verdad, pero que hoy, la verdad está en las colas, en el pueblo hambriento y en los enfermos que no encuentran medicamento y muchos mueren. Pero lo más grave, es que el gobierno crea que puede revertir la desgracia producida por su mala política, culpando al “imperio” de financiar un golpe de Estado, la guerra económica patrocinada por la oposición y la baja del precio del petróleo. ¡No Tibisay, esta desgracia es el producto de un sistema de gobierno que debe ser cambiado y que no puede volver más. ¡Revocatorio ya!
@Enriqueprietos
