Gobierno tras El Nacional
Omar Ávila
A propósito de haber celebrado esta semana el Día de la Radiodifusión, recordamos que en la época de Juan Vicente Gómez, esta comenzó sus operaciones en Caracas, bajo el nombre AYRE, lo que es hoy RCR 750AM.
En esta triste hora para Venezuela, se registran más de 200 emisoras cerradas y 40 televisoras incluyendo a RCTV; resultado de un gobierno revolucionario que imponiendo a la fuerza su sistema comunista, silencia a todo medio que no se preste a sus propósitos.
Actualmente vemos cómo aumenta el acoso a medios como Tal Cual, El Nacional y La Patilla. Donde, ya de manera descarada, hay un bloqueo selectivo por parte de Cantv hacia estas dos últimas páginas web a las que hago mención.
De igual manera salen de circulación tres nuevos impresos regionales de Cojedes, Apure y Trujillo. Otros como el Periódico de Monagas pasa a ser semanario, como le ha ocurrido a seis diarios regionales, que tuvieron que cambiar su periodicidad.
En ese avance hacia esa hegemonía comunicacional, en el año 2016 hubo 360 ataques, en el 2017 esto aumentó 26,5% para llegar a 498 agresiones y 66 capturas de periodistas.
En un plan orquestado por el régimen que ha ido avanzando poco a poco, primero con el cierre de emisoras y televisoras, luego con la compra y apertura de otros medios, y también con la asfixia, en donde por falta de papel, se han visto en la obligación de salir de circulación. Del 2013 a la fecha, van 35 diarios que han dejado de informar por falta de materia prima (unos 18 de manera definitiva y 17 temporalmente).
En ese camino, sacaron de la parrilla de las cable operadoras a CNN en español, Caracol Tv, RCN y El Tiempo.
Según reporteros sin fronteras en el 2017 Venezuela se ubicó en el puesto 137 de 180 países que fueron evaluados en lo que a libertad de expresión se refiere, y sólo durante el gobierno de Maduro, han cerrado más de 150 medios. 60 emisoras cerradas sólo en el año 2017. Más de 500 periodistas agredidos y amenazados; sumado a los procesos intimidatorios a Televen, La Patilla y El Nacional.
El Nacional, por cierto, que es un icono de la libertad y que nunca se ha sometió a la ignominia de este régimen. Rotativo que hoy por hoy, es el último reducto de la expresión de pensamiento independiente y democrático que nos queda.
Por ello, es que defender a El Nacional es una forma de resistencia ciudadana. No podemos permitir que se siga cercenando cada vez más la libertad de expresión y el derecho constitucional de estar informado; razón por la cual, desde Unidad Visión Venezuela, proponemos y promovemos un potazo a nombre de El Nacional para pagar la multa y no permitir que este caiga en manos del régimen, pero también para recolectar fondos para que esos periódicos regionales que hoy se ven obligados a dejar de circular de manera regular, ante la falta de papel, puedan obtener el mismo, y así dar la pelea a ese cerco comunicacional segmentado y palangrista.