El santo Santos quiere mediar
(1) Tan pronto se empezó a rumorar que Chávez nombraría a Maduro como sucesor, el colombiano presidente, santo de pocas velas, cometió otro acto de intervención en Venezuela al declarar que Maduro debiera ser presidente de su confianza por su papel en las conversaciones de paz con las FARC.
(2) Hoy ha declarado su deseo de mediar en un imposible dialogo entre la oposición y el gobierno de Venezuela. Ese deseo no puede ser complacido obviamente. Pero es una muestra más de la cínica ligereza conque el colombiano suele mostrarse ante este impasible país.
(3) El remedio venezolano no es se llama diálogo. Tan cierto es que la prensa ha publicado unas declaraciones de Maduro en el sentido de pedirle a las FAN y a gente del pueblo que se preparen para luchar contra sus opositores. Un aspecto de esa postura es que esa lucha debe darse contra la “derecha” lo cual es una aberración de menosprecio a un sector legítimo representante del país, en la nomenclatura política rutinaria.
(4) Pero el “diálogo” no se justifica para pedir libertad de personas arbitrariamente encarceladas ni para pedir medidas “anti-revolucionarias” ni nada por el estilo. El gobierno ni siquiera quiere avanzar públicamente algunos puntos de agenda.
(5) Al gobierno le conviene seguir en la situación actual sin “diálogo” y al país nada le cuesta seguir en la actual situación aunque le cueste lo que le cueste.