El preso de Maduro
Leopoldo López ha sido condenado a 13 años, 9 meses, 7 días y 12 horas (faltaron los minutos y segundos) de prisión. Uno puede imaginarse a la juez Susana Barreiros (qué diferencia con la jueza Afiuni) participando con fruición a Maduro que al pié de la letra había cumplido sus instrucciones.
También podemos imaginar a Leopoldo López de regreso a su estrecha celda en Ramo Verde con sus escasas pertenencias regadas por el piso, sin poder acomodarlas porque la luz eléctrica todos los días es cortada a las 7:00 pm.
También podemos imaginar a Maduro pletórico de felicidad, pues está convencido de que su aborrecido enemigo se pudrirá en la cárcel.
El de Leopoldo López es un juicio político. Como hay que mantenerlo preso, se le fabricaron delitos que no cometió. En esta era de la televisión, la gente puede ver en vivo lo que sucede, y los venezolanos, en su inmensa mayoría, fueron testigos del carácter pacífico de la manifestación del 12 de Febrero del 2014, para conmemorar el Día de la Juventud.
Como Maduro ha desarrollado fortísima alergia política contra Leopoldo López, le pareció inaceptable que fuera él quien clausurara aquella demostración de civismo. Ordenó a colectivos paramilitares armados y a contingentes policiales que actuaran, con el saldo trágico de dos muertos: Bassil Da Costa y Juan Montoya. El intento de culpar a la oposición fracasó gracias a las tomas obtenidas desde un teléfono celular. Claramente pudo verse a un funcionario del Sebin, con uniforme y letras que lo identificaban, disparando contra los dos occisos.
El desarrollo del juicio puso en evidencia el nivel de degradación al que ha llegado la administración de justicia en Venezuela. En el juicio fueron rechazadas, desestimadas las pruebas presentadas por la defensa sin siquiera examinarlas. El día de la sentencia no dieron acceso a los periodistas, puede decirse que la sentencia fue dictada con nocturnidad y alevosía. El Secretario General de la OEA, Luis Almagro, ha solicitado que se le permita revisar la sentencia. Amanecerá y veremos.
Es importantísimo que la MUD haya expresado su respaldo pleno a Leopoldo López y lo acompañe sin reservas en el llamado a sumarse este Sábado a las marchas y concentraciones a celebrarse en todo el país. El gobierno está montado en la estrategia de sembrar terror para que los electores se abstengan de ir a votar el 6 de Diciembre. La respuesta de la oposición no puede ser la estrategia de la resignación.
