El desenlace está próximo
Es importante no perder la esperanza con relación al desenlace de la actual coyuntura que vive la República. Algunos están desanimados. Piensan que el coronavirus y la cuarentena han fortalecido al régimen mientras que, por el contrario, la oposición luce dividida y prisionera de protagonismos absurdos en este tiempo. Los entiendo, pero a ellos quiero dirigir el mensaje de esta semana.
De esto vamos a salir, pero no será por obra del Espíritu Santo. Según aprendimos de niños Dios está en cada uno de nosotros, fuimos creados a su imagen y semejanza. Además está muy ocupado y a Él debemos ayudarlo con nuestro esfuerzo bajo el aliento de una fe imperecedera. Pero no olvidemos que los demonios existen y las tentaciones también, Como dice el refrán “hay de todo en la viña del Señor”. En consecuencia repito, una vez más, que no debe dispararse hacia los costados. El enemigo está al frente y la tarea fundamental sigue siendo el cese de la usurpación para ir con un gobierno de transición a unas elecciones generales con todas las garantías necesarias. Todo el esfuerzo tiene que concentrarse en estos tres pasos señalados originariamente por la Asamblea Nacional y el Presidente (e) Guaidó, compartidos por más del ochenta por ciento de la Nación.
La desviación electoralista y el presidencialismo agudo y enfermizo de algunos, se han convertido en el obstáculo mayor para alcanzar el objetivo. Eso vendrá después. Ahora le hace el juego a quienes controlan el régimen, en cuyo seno hay señales inequívocas de discrepancias y división. También en las Fuerzas Armadas y en gobiernos y personalidades extrajeras que fueron incondicionales del chávez-madurismo, pero que ahora marcan prudente y hasta abierta distancia.
Todo el trabajo que los partidos emplean en la organización y entrenamiento para participar en unas elecciones, tiene que emplearse en este momento para incorporar masivamente a los venezolanos a la resistencia activa que se necesita para ponerle fin a la usurpación de la que tanto hablamos. Se trata de acciones concretas para alcanzar nuestras metas. Las tareas a cumplir se conocen, pero como todos comprenderán no deben ni pueden exponerse por estas vías. Los dirigentes lo saben.
No podemos entregarnos cuando mataron al Derecho, sin Constitución y sin un ordenamiento jurídico que sea capaz de garantizar los derechos fundamentales de los ciudadanos. La comunidad internacional piensa igual.
Unas palabras finales porque día a día mueren amigos de toda la vida. Imposible mencionarlos a todos, especialmente a los zulianos, pero una especial referencia a Tomás Contreras, Asdrúbal Baptista, César Yegres, Aurelio Concheso, el querido Alcalde Bracho de mi época de Gobernador y paremos de contar. Es duro, pero hay que respirar hondo y pa´lante con todo.
@osalpaz