El candidato ampliado
A menudo los grandes son desconocidos o peor,
mal conocidos.
Thomas Carlyle
Ya que la Unidad no resultó finalmente muy unitaria, y se sabía que había gavilanes coloraos y halcones depredadores acechandopara darle el traidor e insidioso picotazo de rigor; la muy magna aula de la Casa que vence las sombras y las divisiones, acogió en su muy emblemático recinto a la variopinta oposición venezolana que, en guayabera, encorbatada, enfranelada, con bata, uniforme civil, braga de obrero, pluma y collarín, decidió aglomerarse, amalgamarse, fundirse, para ampliar el repudio al inhumano, ineficiente, hablachento castro – madurista socialismo del siglo XXI.
Por supuesto que de inmediato afloró la pregunta de rigor: si no van a ser los de siempre ¿quién será?, y el gallo tapado ha venido tomando nombre, rostro y biografía, hemos sabido que es un venezolano a carta cabal, del más rancio, ancestral y mestizaje origen.
Nació en el estado Trujillo, no en Esnujaque para no desnucarse como chivo coreano, tampoco en Betijoque, pero si en Escuque, el alto. Desde pequeño ya demostraba su vocación de servicio y su alto sentido de responsabilidad ciudadana, que se manifestaba en el reparto dominical de acemitas y dulces criollos elaborados por la familia.
Hijo de un pequeño empresario cafetalero, cuya familia emigró tiempo ha desde la Vascongada a los Andes venezolanos, casó el euskaro descendiente con una criolla proveniente del centro del país para procrear y levantar una bella familia, digna de encomio y admiración.
El hijo mayor prontamente emigró a la capital para cursar a la vez estudios de derecho y de ciencias políticas en la UCV; con las más altas notas egresó y de una muy merecida beca disfrutó para doctorarse en la Universidad del país vasco, y sin más regresar al país para dar clases, realizar análisis políticos y prestar servicio comunitario.
En vista de la escasez, inhabilitación o vetustez de la dirigencia opositora, ha sido requerido para presentar su nombre como candidato ya no unitario sino ampliado. Por supuesto que el país está ansioso de conocer sus nombres y apellidos… de muy buena fuente sabemos que es colombroño, tocayo, del beato varón trujillano aún sin santificar, y lleva dos sonoros apellidos cónsonos con sus orígenes vascuences y venezolanos.
Más vasco – venezolano no puede ser un compatriota tan honroso y destacado que porte el apellido paterno Maiz y el de su madre: Yuca. A votar pues por
¡JOSÉ GREGORIO MAIZ YUCA!