El Auge de los Asesinos
La palabra “asesino” tiene un origen árabe. En efecto, quiere decir “adicto al hachis” y se refería a una secta que cometía asesinatos a nombre de Alla, inducidos por el consumo del hachis que no es otra cosa que la cannabis sativa, que es lo que se conoce en el resto del mundo, como lo equivalente a la marijuana.
En la historia de la humanidad son incontables las personas que han cometido asesinatos, los asesinos, que han causado la muerte por motivos de envidia, religiosos, políticos, bélicos, de venganza, de locura, para robar o en secuestros.
Así vemos como Caín mató a Abel, Bruto y otros senadoras apuñalearon a Julio César, Charlotte Corday mató a Marat, John Wilkes Booth le disparó a Lincoln, causándole la muerte, Lee Harvey Oswald ultimó a John Kennedy, los soldados rusos matan a civiles ucranianos, y el secuestrador del hijo de Charles Lindbergh, quien también lo mató.
Todos esos asesinatos tienen explicaciones. motivaciones, mas no justificaciones, ya que causar la muerte de un ser humano es algo que muy difícilmente se puede justificar.
En Estado Unidos y en otras partes del mundo, estamos viendo en estos últimos años, como hay un auge de asesinatos cometidos por asesinos que nos hacen difícil entender las razones y motivaciones que hayan llevado a los asesinos a cometer esos actos horrorosos. Así vemos lo que ocurrió no hace mucho en una escuela de Texas, lo ocurrido en Illinois durante el desfile del 4 de julio y justo ayer, 7 de julio, el asesinato el ex primer ministro japonés, Shinzo Abe.
En Estados Unidos, senadores y políticos republicanos, sostienen que esas muertes masivas de civiles inocentes, se deben a la mala influencia de la televisión y de los juegos electrónicos y no al hecho, de la libre venta de armas automáticas y semiautomáticas que solo deben portar fuerzas militares y policiales. Yo sostengo que esas ventas causan esos asesinatos, y así lo dije en un artículo publicado en Analítica bajo el título de “Venta de Armas para asesinar”. El hecho de que los asesinos no sean matados y que hayan sido detenidos, pueden dar lugar a que se les someta a exámenes que permitan determinar las motivaciones.
