Calma y Cordura
«Calma y cordura», esas fueron las sensatas palabras con las que el general López Contreras inició el período de transición a la muerte de Juan Vicente Gómez, cuando comenzó el camino hacia la democracia que, fue en su primera etapa, controlado por dos generales del gomecismo. En cierta medida cumplieron bien su tarea, salvo que el ritmo que imponían era tal vez un tanto lento para la sed de democracia plena que tenía gran parte del país.
Otro ejemplo, este si mucho más largo que el venezolano, fue el que se adoptó en República Dominicana después del tiranicidio que acabó con la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo. En ese país, paradójicamente, la transición la llevó a cabo Joaquín Balaguer, quien fuera ministro del tirano e incluso presidente encargado.
En Venezuela, aún no se vislumbran los acuerdos necesarios para lograr los cambios fundamentales que darían viabilidad económica, política y social al país, ya que la actitud cerril de los que dirigen nuestros destinos hace que en vez de abrir caminos se cierren, pues parecieran convencidos que cualquier apertura los borraría del mapa político.
Frente a esa actitud quienes desean que se produzcan cambios y se restablezca la institucionalidad deben actuar con calma y cordura, y tratar principalmente de recomponer la unidad en las diversas expresiones que componen a la oposición democrática, dejando de lado el protagonismo y el personalismo de pequeños líderes y elaborar con sinceridad un gran acuerdo nacional, en el que tengan cabida todas las corrientes democráticas y sobre todo plantear las medidas indispensables para solucionar la crisis, así cómo se podrán llevar a cabo y en qué lapso se podrían ver sus efectos.
La banalización de la política, basada en promesas demagógicas que nunca se podrán cumplir, tiene obligatoriamente que ser sustituida por un verdadero programa de transformaciones que no debe ser edulcorado, sino presentado tal como tiene que ser. La verdad es la única garantía de que el pueblo entienda y apoye un verdadero cambio en Venezuela.