OpiniónOpinión Nacional

Aquellos 23 de enero

El ajetreado 23 de enero

Mucho se ha escrito sobre las consecuencias históricas y políticas de los días previos y posteriores a la caída de la dictadura que, en manos del general Marcos Pérez Jiménez, los venezolanos soportaron durante diez tenebrosos años, pero he aquí lo que sucedió ese día 23 de enero de 1958.

En la madrugada el comandante Wolfgang Larrazábal llega a la Escuela Militar. A la 1:20 a.m., se propagan rumores en la Escuela Militar de que Radio Caracas Televisión es tomada por un piquete de soldados leales a los conspiradores. Se decide enviar para la televisora al Dr. Centeno Lusinchi para que transmita la noticia sobre la caída del Gobierno. 

El Dr. Centeno junto a los militares, transmite a la nación el primer comunicado sobre el levantamiento de los militares contra el dictador. Mientras tanto, el general Marcos Pérez Jiménez huye del país. En La Escuela Militar se forma una Junta de Gobierno presidida por el contraalmirante Wolfgang Larrazábal.

Suceden manifestaciones populares y los manifestantes se dirigen al Palacio Blanco, voceando: “Civiles a la Junta de Gobierno”. Los integrantes de la Junta Patriótica se dirigen a 10.000 personas en un mitin en el Estadio Universitario.

El 23 de enero Maracucho

Cuando cayó la dictadura de Pérez Jiménez, en Maracaibo la noticia corrió como pólvora hasta el punto de que, en medio del deseo de vivir en democracia, de inmediato se dieron manifestaciones por la libertad de los presos políticos, detenidos en las mazmorras marabinas.

El 23 de enero la gente comenzó a congregarse en la plaza Bolívar, allí la multitud no se cansaba de corear: ¡Abajo la Tiranía!  La Sociedad Patriótica, liderada por Fermín Meóz Cepeda, Ángel Emiro Govea y Vinicio Nava, entre otros, resolvieron ir a rescatar a los compatriotas detenidos.

El tumulto partió rumbo a la plaza Baralt, en la esquina de La Zulianita se encontraron con otros manifestantes. Todos se dirigieron hacia el Mercado Principal, donde Vinicio Nava, se dirigió a los manifestantes, arengándoles de que había llegado la hora de ir a soltar a todos los presos políticos.

A la vieja fortaleza egipcia que servía de cárcel pública, fue el pueblo a liberar a sus luchadores por la democracia. Algunos prisioneros del régimen llevaban varios años presos.  Ese día recobraron la libertad, entre otros, Luis Vera Gómez y Paz Galarraga.

El 23 de enero Fidel

Con motivo de celebrarse el primer año de la caída de la dictadura perezjimenista, el 23 de enero de 1959 Fidel Castro fue invitado como un huésped de honor, porque también en Cuba, ese mismo mes; de la Sierra Maestra, este bajó con su guerrilla, después de haber derrocado al dictador Fulgencio Batista.

Entre quienes oficialmente acudieron a Maiquetía a recibir al líder ataviado con su uniforme verde oliva, se encontraban Wolfang Larrazábal, Jóvito Villalba, Fabricio Ojeda, Luis Beltrán Prieto Figueroa y por supuesto, los líderes del Partido Comunista de Venezuela.

Una marea humana acompañó en Caracas a Fidel al encuentro con los aguerridos dirigentes estudiantiles de la UCV, protagonistas fundamentales en las luchas contra la dictadura de Pérez Jiménez. En el Aula Magna fue recibido, entre otros, por el poeta chileno Pablo Neruda.

Con Rómulo Betancourt, el encuentro fue sobrio y privado, aunque muy significativo. Fidel fue a lo suyo y, cuentan que le propuso al anfitrión, la posibilidad de darle un crédito a Cuba para la compra de petróleo. El tiempo y los hechos políticos a futuro, evidenciaron que Rómulo se lo negó, para no tener problemas con las petroleras gringas.

El 23 de enero de las FALN

Apenas de haber pasados 48 meses del célebre 23 de enero, en muchos aprietos andaba el primer presidente de la era democrática, ya que ese mismo día le estalla en la capital de la república, una huelga general del transporte, el cual en las próximas horas se hizo extensivo a todo el país.

Aquel 23 de enero las Fuerzas Armadas de Liberación Nacional (FALN), a través de sus Unidades Tácticas de Combate (UTC), hacen estallar cajas sonoras contentivas de propagandas, recordando el glorioso 23 de enero de 1958 cuando el pueblo en las calles, luchó por el regreso de un verdadero gobierno democrático.

Hay manifestaciones en casi todas las calles de Caracas. Una fuerte explosión causa estruendo en la Embajada de los Estados Unidos. Los disturbios estudiantiles y los enfrentamientos con la policía, al terminar el día dejan un saldo de tres muertos, varios heridos e infinidad de detenidos.

En este otro 23 de enero de 1961 se suspenden por tiempo indefinido los programas de noticias que transmite Radio Rumbos. Desalojan el recinto universitario a fin de prevenir disturbios y se suspenden las actividades docentes en planteles educativos en toda la República.

Los comentarios, textos, investigaciones, reportajes, escritos y demás productos de los columnistas y colaboradores de analitica.com, no comprometen ni vinculan bajo ninguna responsabilidad a la sociedad comercial controlante del medio de comunicación, ni a su editor, toda vez que en el libre desarrollo de su profesión, pueden tener opiniones que no necesariamente están acorde a la política y posición del portal
Fundado hace 28 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te puede interesar
Cerrar
Botón volver arriba