522 años después
Entonces se habló de una tal empresa descubridora estatal que junto con la iglesia toman, con la sin razón de las armas, la cruz y la idea del exterminio, tierras, hombres y sus frutos. Y quienes se presentan como civilizados entienden que la población existente ni siquiera tiene condición de gente. Así se justifica la apropiación de todo lo invadido.
Desde entonces propietarios y supeditados, superiores e inferiores. Y es con los descubridores, que someten a los descubiertos, como pretendieron iniciar su proceso, negando la historia milenaria previa. Así invasión y falsificación son una misma cosa.
Y frente a esta falsificación de la historia antepusimos desde los 80’ la tesis de los No Descubiertos. Señalamos que no hay sociedades superiores e inferiores, descubridoras y descubiertas. Lo que prevalece en la historia de la propiedad es la acción de tomar, invadir y someter.
Los No Descubiertos no aceptan la condición de inferioridad ni la tesis de una historia que habría comenzado con el invasor. Somos una sociedad milenaria en busca de otra conciencia y otra condición, convencida de que Nadie descubre a Nadie.
Hasta hoy pesa sobre esta sociedad el estigma de los descubiertos. Y los descubridores, dueños y señores han continuado la labor de sometimiento, control o exterminio. Esto se plantea en la contienda independentista, las dictaduras, lo que se nombra como democracia y en la revolución que padecemos. En cada momento están los sacrificados a una u otra causa.
Hoy estamos ante la acción de otros descubridores-opresores. La misma historia. Al colectivo-pueblo no se le lanza la máxima del “Hazte cristiano y sometido o muere!” Pero se le dice: estás con el socialismo o formas parte del enemigo y la traición. Hoy se puede ser colectivo-revolucionario y mañana delincuente abatido por el CICPC como los cinco de Quinta Crespo encabezados por José Odremán.
Y con este agravante: el invasor Venecuba de hoy puede seguir con estas acciones sin tropiezos porque no tiene una posición que lo enfrente sino otra política que se suma a su visión descubridora.
Sancho, 522 años después el exterminio-persecución vive en esta revolución descubridora.