Se debe constatar la calidad de la textura de las telas y su coloración
La tecnología ha aportado logros para mejorar la calidad de vida en todos los campos, bien sea la ciencia, la salud, la industria y los negocios, en general. De igual forma ha favorecido la durabilidad de la prendas de vestir y lencería.
Carlos Josa es un profesional en el cuidado y mantenimiento de la ropa. Es director de Tintexpress, una marca especializada en el teñido profesional de las prendas de vestir y lencería.
Sostiene el especialista, que la calidad de la ropa comienza desde que se está produciendo la tela, con la preparación del hilo. “Si se hace muy endeble, no va a servir porque se va romper mientras se está cosiendo, por lo que la industria precisa usar un hilo de buena calidad”.
Afirma que la propiedad del hilo dará resistencia a la tela a la hora del lavado. Por lo general, logra darle de 80 a 120 lavadas antes de que comience a observarse al hilo viejo y desgastado y, como consecuencia, se rompa. Por ello es importante que al comprarla se revise la calidad y textura a fin de constatar sus atributos.
“Algunos confeccionistas se preocupan por la textura pero no por el color, por lo que la prenda de vestir pierde vida y comienza a decolorarse eso que adquirimos con tanto gusto”.
Josa trabajó casi 20 años en el teñido de las telas destinadas a la industria de la confección. De allí conoce sus particularidades. “Si se calcula un promedio de 4 lavadas por mes, se intuye que después de 12 o 15 lavadas la prenda se vea descolorida y nos lleve a comprar otra. Estaríamos hablando de 3 o 4 meses de vida”.
En consecuencia, el experto recomienda colorear la ropa y la lencería dado que “al teñir la prenda queda tan nueva como la primera vez porque 10 lavadas es el 10 por ciento de su vida útil. Pensar que al decolorarse ya no sirve es un falso paradigma. Eso hay que enseñarlo a la gente. Es cuestión de educación”.
He aquí cuando la tecnología hace presencia, dado que Tintexpress, con maquinas industriales de última generación, renueva o cambia el color de las prendas con colorantes y químicos importados, con altas propiedades de coloración, igualizantes, fijadores, dispersantes y sulfatos que aunados a la metodología profesional del proceso, ofrece una ropa nueva que pareciera que se está estrenando de nuevo.