Río de Janeiro, la ciudad olímpica de 2016
Río de Janeiro, también llamada la “Ciudad Maravillosa”, albergó en 1950 a la Copa Mundial de Fútbol, en 2013 a la Copa de las Federaciones y en 2014 fue anfitriona, nuevamente, de la Copa Mundial de Fútbol. Ahora regresa con la celebración de los Juegos Olímpicos 2016.
Pero no solo se le conoce por esto; también es uno de los principales centros económicos, de recursos culturales y financieros del país, y se destaca internacionalmente por sus íconos culturales y paisajes, como el Pan de Azúcar, la estatua del Cristo Redentor (una de las siete maravillas del mundo moderno), las playas de Copacabana e Ipanema, el estadio Maracanã, el Parque Nacional de Tijuca (el mayor bosque urbano del mundo), la Quinta da Boa Vista, la isla de Paquetá, las Fiestas de Fin de Año en Copacabana y la celebración del Carnaval.
Con casi siete millones de habitantes, es la segunda ciudad más poblada de Brasil, después de São Paulo.
La urbe comenzó su historia en el siglo XV, con las exploraciones marítimas que surgieron de Portugal y que llegaron en 1499 a la bahía de lo que ahora se conoce como Brasil. Fueron Gonzalo Cohelo y Américo Vespucio los que bautizaron la zona con el nombre de “Río de Janeiro” al confundir la bahía a la que entraban con un río común y corriente. Dicha llegada se dio en el mes de enero. De ahí el nombre de “Río de enero” (Rio de Janeiro).
Capital europea
Río de Janeiro se convirtió en la única capital europea fuera de Europa, gracias a que a principios del siglo XIX Napoleón Bonaparte amenazaba Europa, y muchos de los reyes del viejo continente se vieron obligados a exiliarse. En 1808, la familia real portuguesa, junto con una corte formada por alrededor de 15.000 personas, dejaron el país y se establecieron en Brasil.
En la actualidad, la metrópoli vive a través de su música, el fútbol, la calidez del carioca (oriundo de la ciudad), la samba, el carnaval, los bulevares, la gastronomía nacional e internacional, entre otras cosas.
Definitivamente hay mucho que sacar de esta hermosa ciudad, que una vez más es elegida para ser expectante de lo que serán los Juegos Olímpicos 2016.
Por ello, La candidatura de Río de Janeiro propuso la realización de casi la totalidad de los eventos deportivos dentro del área urbana, concentrándose en cuatro zonas: Maracaná, Barra da Tijuca, Deodoro y Copacabana.
El estadio de Maracaná, conocido mundialmente como el estadio más grande de Brasil y el más amplio del mundo durante mucho tiempo, fue sede de las Copas del Mundo de Fútbol en 1950 y 2014.
Barra da Tijuca es una de las regiones que más crecieron en Río de Janeiro en los últimos años y es considerado un centro gastronómico y de entretenimiento.
Deodoro es un barrio carioca de 10.842 habitantes, situado en la región administrativa XXXIII —Realengo— de la subprefectura de la zona oeste.
Copacabana es uno de los barrios más famosos de la ciudad. Antiguamente llamado Sacopenapã, debe su actual nombre a una copia de la Virgen de Copacabana, cuyo santuario se encuentra en Copacabana, Bolivia.
En el sector de Barra de Tijuca será sede no solo de diversos deportes, sino que además concentra la Villa Olímpica y los centros de prensa, difusión y transmisiones.
En los alrededores de Barra tendrán lugar también los deportes de piragüismo y remo en el lago Rodrigo de Freitas, siendo la primera vez que estos deportes se harán en un contexto urbano. También, en las inmediaciones de Barra de Tijuca se encuentra Riocentro otra de las sedes propuestas, en cuyos recintos se disputaran competencias de los deportes de Bádminton, Boxeo, Halterofilia y Lucha; ya está confirmado que cuatro de sus seis pabellones serán los utilizados para estas competencias olímpicas.
Algunos deportes ocuparán lugares emblemáticos de Río, como las playas de Copacabana, uno de los orígenes de ese deporte, mientras que el típico escenario del sambódromo albergará la maratón y la marcha atlética.
La región de Deodoro, localizada en la zona oeste, será el escenario de las competiciones de hipismo, ciclismo entre otros mountain bike y BMX, pentatlón moderno, tiro deportivo, canotaje slalom, hockey sobre césped, baloncesto y rugby. Además, acogerá pruebas de fútbol de 7, tiro deportivo, hipismo y esgrima en silla de ruedas de los Juegos Paralímpicos.
