Los brillos y destellos reinaron en la alfombra roja de los Globos de Oro
Los Globos de Oro inauguraron la temporada de premios en Hollywood con una alfombra roja en la que brilló Lady Gaga, una de las estrellas del año gracias a «A Star is Born», y que contó con mucho sabor latino de la mano de Penélope Cruz o Antonio Banderas.
Gaga conocida por su enorme talento musical e interpretativo como por sus impactantes «looks», apostó por un largo vestido azul celeste, con los hombros al aire y unas abultados adornos en el antebrazo, que acompañó con un collar brillante y el pelo recogido con un moño teñido de añil claro.
Estos Globos de Oro, unos galardones que organiza la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood (HFPA), son los primeros tras la histórica edición de 2018, en la que prácticamente toda la comunidad del cine y la televisión se vistió de negro para denunciar el acoso sexual a las mujeres.
En esta ocasión, aunque artistas como Rachel Brosnahan vistieron pulseras en homenaje al movimiento feminista «Time’s Up», Hollywood dejó de lado el negro y se dejó llevar por los brillos y los remates metálicos.
Esa fue la baza, por ejemplo, de Penélope Cruz, con un vestido escotado negro y brillante con un lazo en la espalda, o de Nicole Kidman y su conjunto granate y metálico.
Los brillos y destellos, ya fuera para realzar prendas enteras desde chaquetas a vestidos o solo como pequeños detalles de color, también fueron una marca clara en los conjuntos de Carol Burnett, Glenn Close, Gina Rodríguez, Rosamund Pike, Jessica Chastain o Regina King.
Y a tono con el aroma desenfadado y juguetón que suele reinar en los Globos de Oro, donde el champán no deja de circular en la alfombra roja, otras estrellas apostaron por vestidos muy coloridos.
En este sentido, Amy Adams lució un intenso azul en su vestido y Claire Foy y Rachel Brosnahan se presentaron con sendos conjuntos amarillos.
En cuanto a los hombres, casi siempre más encorsetados en el clásico esmoquin negro y blanco, algunos se atrevieron con algo distinto como Idris Elba, que vistió un traje en tonos verdes, o el siempre original Spike Lee, con un conjunto morado remachado con una boina y un colgante dorado.