“La Golfeadería” ofrece un dulce criollo para la transición venezolana
Carla Trocel es una ingeniera química egresada de la Universidad Central de Venezuela, sin embargo, su pasión ahora se centra en “La Golfeadería”, un local ubicado en San Antonio de Los Altos, estado Miranda, en el que ofrece golfeados, pero no cualquiera.
“La Golfeadería” trabaja con un concepto de variedad en el que se ofrecen golfeados con crema de chocolate y crema de guayaba, además del tradicional con queso llanero. Pero también cuenta con la receta de golfeados veganos, es decir, que no incluyen ingredientes como la leche y el huevo. Dicha variedad surgió de la participación de “La Golfeadería” en el “Caracas Vegan Fest”, una feria que se define como “respetuosa con el ambiente y los animales”. En dicha feria, la propuesta de “La Golfeadería” fue el ‘golfeado pizza’, preparado con salsa de tomates, berenjena y albahaca.
Y esa definición es precisamente otra característica que posee “La Golfedería”: “El concepto de la marca busca promover la cultura del reciclaje”, dice Trocel, dueña del emprendimiento. “La idea no es solo comprar un dulce, sino que también quiero dejar un mensaje reflexivo para promover un cambio positivo en el país, porque si es por vender golfeados en cualquier lugar lo hacen”, continuó.
Sin embargo, Trocel afirma que los golfeados que ella misma prepara se diferencian por el sabor, ya que todo lo realiza artesanalmente; la variedad, porque no solo es un golfeado con queso; y por su concepto basado en el reciclaje, la solidaridad y la promoción de los dulces criollos.
La transición de ser ingeniera química a repostera surgió por la pasión que tiene Carla por la cocina, ya que, según sus propias palabras, hacer golfeados es algo que le gusta y le divierte. Además, siempre tuvo la visión de ser dueña de su propio negocio, y durante su carrera aprendió cosas que hoy en día le sirven como base para su ideales.
“La cocina me sale natural, es algo que siempre he hecho y me ha gustado. En algún momento sí quisiera hacer cursos de gastronomía para aprender más. Pero en este sentido, mi base ha sido leer y experimentar”, explica la ingeniera química.
El surgimiento de “La Golfeadería” viene desde el año pasado, cuando la marca, bajo el nombre “Golfeados CATY”, para el momento, fue patrocinante de una carrera de montañistas, en la cual tuvo un gran éxito y logró hacer más populares los dulces.
El próximo 2 de septiembre “La golfeadería” será la encargada de ofrecer el postre en un evento realizado por “Cook Jazz”, una idea que promueve la música y el arte culinario.
“‘Cook jazz’ ofrece comida inspirada en una canción y el golfeado será uno de los postres que la gente podrá comer, la idea es brindar un golfeado especial para una canción especial”, explica Carla, quien además, afirma tener grandes aspiraciones para su negocio, entre ellas poder tener más puntos de venta, tener servicios de catering y, por qué no, llevar sus golfeados al exterior.
El mensaje final que Trocel puede darles a quienes desean emprender se basa en que deben seguir tres principios fundamentales: la disciplina, la constancia y hacer todo con amor.
Para mayor información sobre “La Golfeadería” pueden contactarlos en las redes sociales, Facebook: La Golfeadería Deli, y en Instagram y Twitter: @lagolfeadería.