Jugo de parchita para la anemia
La anemia se conoce como la «falta de sangre». De manera más precisa, la anemia es la disminución del número de glóbulos rojos (también llamados de hematíes o eritrocitos) en la sangre. El principal síntoma de esta enfermedad es el cansancio y la debilidad.
Existen diferentes tipos de anemia que tienen cada una su tratamiento particular, y debe ser supervisado por instrucciones médicas. Pero sin duda, hay alimentos que nos ayudan a prevenirla y combatirla. La parchita, maracuyá o fruta de la pasión es un ejemplo muy importante.
Se le llama fruta de la pasión no por propiedades afrodisíacas. El verdadero origen de este nombre proviene de la época de los misioneros en América. En aquél momento, se utilizaban las flores de la planta de la parchita —color morado con toques rojos— en semana santa para simbolizar la corona floral con filigranas de la misma mata en la representación de la pasión de Cristo.
Esta deliciosa y exótica fruta posee vitaminas A, C y varios tipos de vitamina B, así como potasio, fósforo y magnesio. Tiene propiedades antimicrobianas, controla el estreñimiento y potencia la función de la absorción del hierro en el organismo, por lo que es un buen apoyo a la hora de combatir la anemia.
Es originaria del Amazonas y se produce principalmente en Brasil, seguido por Venezuela, Colombia y el resto de los países tropicales. Se conocen 400 especies en Venezuela.
No hay excusa para no tener en una jarra jugo de parchita en la mesa, en lugar de una botella de refresco. El sabor de la parchita, además de incomparable, es refrescante.
Se recomienda el consumo de un vaso de este nutritivo y efectivo jugo en cualquiera de las comidad diarias.
Ingredientes:
- 5 Parchitas.
- 1 litro de agua.
- Azúcar al gusto.
Preparación:
Colocar la pulpa de las parchitas en la licuadora, junto con medio litro de agua, licuar hasta triturar bien las semillas y luego colar y colocar en una jarra de vidrio. Finalmente se añade azúcar y más agua al gusto.
Propiedades de los ingredientes:
Es energizante, antidepresivo, antihipertensivo, antimicrobiano entre otros.
«Que tu alimento sea tu medicina». Hipócrates, conocido como el «Padre de la Medicina”.