Garofano, un bouquet que se puede heredar
Casarse es el sueño de casi todas las mujeres en el mundo. Casarse con todas las de la ley, con vestido blanco, velo y corona. A lo tradicional, con cortejo, dama de honor y pajecillos. En un boda así, para una novia así, el bouquet es parte fundamental de ajuar.
Pero el bouquet de siempre, el tradicional, es solo para esa noche, porque hecho de flores naturales, estas terminan por secarse a menos que usted haya pensando en otra alternativa. Eso hace Mariana Boccia, una artista florar caraqueño-italiana, que luego de estudiar contaduría en la universidad decidió que lo suyo era diseñar bouquet’s de novias que pueden guardarse para siempre y heredarse a nuestras hijas.
Su nombre es Garofano, que traducido al español es Clavel. «El apellido de mi abuela es Garofano», refirió Mariana para explicar por qué es este el nombre de su marca «quise rendirle un tributo a ella» y por supuesto aprovechar lo que traduce porque «los claveles son flores hermosas».
Cada bouquet es único, exclusivo y personalizado, porque «cada novia participa activamente en la elaboración del bouquet, en cada etapa, en cada paso, en la selección de los materiales, diseño y colores», comentó Boccia y agregó que por eso «cada uno se entrega con un certificado de autenticidad».
Los bouquet’s de Mariana Boccia son especiales porque mezclan pedrería, broches, tela e incluso flores naturales. «Son especiales porque incluso la novia puede entregarme una joya especial para ella o su familia, una joya heredada de su madre o abuela e incluirlo en su bouquet» y esto les imprime mayor personalidad a cada uno de sus trabajos.
Lo natural siempre está de moda
Pero no siempre las novias quieren llevar en sus manos joyas, obras de arte, a muchas les encantan sus bouquet’s tradicionales, hechos de flores naturales, que puedan lanzar a sus amigas al final del casamiento, pues para ellas, Boccia tiene una alternativa.
«Hacemos bouquet’s que tienen una base perdurable que cuando las flores se sequen la novia igual podrá conservar una parte de su ramo y tendrá su recuerdo en casa, podrá heredarlo a sus hijas o nietas y a estos les agregamos las flores naturales que le imprimen un toque especial porque es el brillo, color y textura de la flor, pero además es su olor», comentó la artista.
Se trata de dejarle a la novia una pieza que luego pueda usar en el futuro, no solo como herencia o recuerdo, sino incluso que agregándole más flores pueda colocar como centro de mesa en una reunión especial en su hogar, con amigos y familia y que le haga tener siempre presente ese momento especial.
Además, no solo es el bouquet, si una novia lo requiera Garofano puede acompañar todo el proceso de decoración floral de la Iglesia y el lugar de la recepción. «Hay novias que nos han pedido hacer un conjunto entre la decoración, el vestido, los colores que ella llevará en su bouquet y la decoración de la Iglesia y ahí estamos para ayudarla y regalarle el mejor día de sus vidas».
Lo tradicional priva
Aunque algunas novias se atreven y piden colores como el morado, el rojo o el negro, la mayoría, explicó la artista floral, se va por lo tradicional. «La tendencia en las bodas es lo tradicional», afirmó y prosiguió «la mayoría se va por el blanco, el color perla, los colores pasteles, yo creo que les da un poco de miedo salirse del esquema».
Sin embargo, hay colores como el plateado que le imprimen elegancia al ramo, por lo que en Garofano tratar de marcar alguna pauta sin apabullar a la novia dando recomendaciones sobre materiales, rtexturas y algunos colores que pueden agregarse sin romper con lo que cada una quiere.
Pero por muy tradicional que sea una novia, siempre pide cosas que salen de lo común. «Me han pedido colocar relicarios en los bouquets, para llevar la foto del padre fallecido. Cuando me pasa eso, salgo a indagar un poco sobre la novia, sobre las tendencias, porque me sacan de lo convencional».
Al final, no importante la tendencia, porque «no debe haber nada más horrible que estar en tu boda y no ser y sentirte tu», en una celebración de este tipo se trata no de la moda sino de lo que la novia quiere para si misma ese día tan especial.
Para el mundo
Boccia, como todos los emprendedores que quieren volar alto, no solo diseña y produce para Venzuela. También tiene clientas venezolanos que viven en otras latitudes y hasta ahí van a tener sus creaciones. Relató que ha tenido la posibilidad de producir bouquet que han viajado hasta Estados Unidos o Panamá y ha llegado intactos.
Este mercado -consideró Mariana- está abierto para todas las mujeres que sueñan con el día de su boda. «En Venezuela son cada vez más difíciles las condiciones y muchas venezolanas han emigrado, ellas terminan siendo mis clientas» y poniendo a Garofano en la mira internacional.
¿Y si se trata de una creación con flores naturales y está fuera de Caracas?
-Trabajo con la novia por teléfono, correo, skype, etc y luego cuando le envío el bouquet me pongo en contacto con su organizador de boda o decorador y le doy indicaciones precisas para terminar de armar el bouquet con las flores naturales.
El traslado siempre es una cosa complicada, que da miedo y causa angustia porque siempre pienso que puede golpearse, pero el trabajo se elabora con tanto cariño y dedicación que siempre llegan perfectos a sus destinos.
En Caracas, Garofano tiene su estudio y luego de que Boccia ha establecido un primer contacto con las novias, las invita a su ateliér para entonces comenzar el proceso de elaboración de la pieza. «Primero me reúno en un sitio público, estudio a la novia, le presento algunas cosas, escucho lo que ella quiere y luego pasamos a la fase de establecer una relación más cercana».
Garofano no es solo bouquet’s, Mariana Boccia también elabora coronas de flores para damas de honor, pajes y para niñas que serán bautizadas o harán su comunión. Priva el mismo principio, son diseños únicos, con su certificado de autenticidad y en los que la madre también participa. Para contactar a Garofano puedes seguir por sus redes en Instagram como @garofanobouquet o al correo [email protected].
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