El legado de Saint Laurent se exhibirá en sendos museos en París y Marraquech
El modisto francés Yves Saint Laurent archivó toda su producción desde que en 1961 fundó su firma de alta costura con el empresario Pierre Bergé, quien el jueves presentó los dos museos, en París y Marraquech, que a partir del próximo otoño exhibirán ese fondo único.
El primer museo en abrir sus puertas será el de París, el 3 de octubre, un día antes de que concluya la Semana de la Moda para la temporada Primavera-Verano de 2018, subrayó Bergé, quien no quiso perderse el acto pese a estar convaleciente de una intervención, según recordó su esposo, el paisajista estadounidense Madison Cox.
En Marraquech, el museo quedará inaugurado el 19 de octubre, añadió el empresario, coleccionista y mecenas francés sentado bajo una pantalla donde se proyectaban fotos del joven Saint Laurent, de sus creaciones, y de ambos cuando eran pareja.
Centro cultural
Concebido como un centro cultural, con salas de exposición, auditorio para 150 personas, biblioteca, librería y café, la nueva institución marroquí dispone de 4.000 metros cuadrados para exhibir, conservar y restaurar si es preciso las obras que exponga.
Ha sido construido por los arquitectos Karl Fournier y Olivier Marty, de Studio KO, que desde hace 15 años trabajan, entre otros países, en Marruecos, aunque confesaron haber quedado sorprendidos cuando fueron elegidos para este proyecto.
Muy satisfecho con su trabajo, Bergé reconoció haber soñado «por supuesto, con encargar el proyecto a un gran arquitecto de renombre internacional», pero pensó de inmediato que prefería evitar «meterse en un lío así».
El encargo era hacer «algo marroquí y contemporáneo», dijeron los arquitectos, que celebraron haber trabajado con entera libertad aunque subrayaron que, dada la «naturaleza impaciente» de Bergé, optaron por asociarle en el proceso de creación desde el primer momento, por lo que tienen la sensación de «haberlo hecho juntos».
Inspiración en diseños de Saint Laurent
Construyeron el edificio con granito, tierra cocida local, fragmentos de piedra de Marruecos y cemento, y adornaron el sobrio juego de curvas y rectas de su fachada, inspiradas en las creaciones de Saint Laurent (1936-2008), con una puntilla de ladrillos que recuerda la materia prima textil utilizada por el maestro.
El museo albergará y exhibirá una parte de los 5.000 modelos y los 15.000 accesorios de alta costura, de las decenas de miles de croquis, planchas de colección, fotografías, artículos de prensa y documentos varios que dan fe de la genialidad del modisto.
Cox, que tomó muy brevemente la palabra para introducir el acto, es también vicepresidente de la Fundación Yves Saint Laurent-Pierre Bergé y director del Jardín Majorelle de Marraquech, que el modisto y el empresario adquirieran en 1980 para salvarlo de un proyecto inmobiliario y que hoy recibe 800.000 visitantes.
Subrayó ese éxito el propio Bergé como antecedente indispensable de los dos museos que lanza ahora la fundación y como buen augurio, tras recordar el «excepcional flechazo» que él y Saint Laurent sintieron por esa ciudad marroquí cuando la descubrieron en 1966 y compraron ya en ese primer viaje su primera casa allí.
«Diálogo con el arte»
«No habría museos ahora si no hubiésemos hecho los Jardines de Majorelle», dejados en el abandono en 1962, con la muerte de su creador, el pintor francés Jacques Majorelle, y cuya fama actual demuestra que «sabemos cómo proceder» y «dominamos los códigos de la comunicación y la recepción», resaltó.
Previamente el mecenas contó cómo en 2002, cuando YSL dejó su oficio, él quiso «transformar nuestros recuerdos en proyectos», lema de la fundación diseñada para prolongar la historia de la ‘maison’ de costura, que en 1962 se instaló en la calle Spontini, hasta que en 1974 la firma se trasladó a la avenida Marceau.
En esa dirección el maestro trabajó ya siempre y allí también, donde la fundación comenzó a exponer su obra a partir de 2004 con la exposición «Yves Saint Laurent, dialogue avec l’Art» («YSL, diálogo con el arte»), es donde en octubre abrirá el museo con una superficie ampliada a más de 450 metros cuadrados.