Figueredo: Lo peor que ha sucedido es la pérdida de valores
Este miércoles, el profesor y locutor José Eduardo Orozco le dio la bienvenida a su programa «De educación y algo más» al abogado con doctorado en jurisprudencia en la Universidad de Sapienza en Roma y ex-embajador en las Naciones Unidas, Emilio Figueredo Planchart, quien desde su perspectiva comenta la situación que atraviesa actualmente Venezuela en sus diferentes ramas, siendo 2017 el año del cambio.
Figueredo aseguró que «lo peor que ha sucedido es la pérdida de valores» y es por ello que se debe sembrar los mismos en cada hogar venezolano.
“Ninguna organización en el mundo se maneja sin política. La política es lo que mueve al mundo”, afirmó Figueredo.
Asimismo, subrayó que en Venezuela se debe respetar los derechos, ya que ello está por encima de cualquier institución y que a su vez las sanciones sean cumplidas sin importar quien las infrinja. Sin embargo, también hizo un llamado de atención a todos los padres venezolanos, quienes a través de la educación que les brindan a sus hijos, hacen un verdadero aporte para el “cambio necesario del país”.
Figueredo también manifestó que en Venezuela ocurre una confusión entre la moral y la ética, ya que las enlazan con el capitalismo y el socialismo, es por ello que es “urgente una reingeniería” en la nación. “¿Cuántas empresas han cerrado y cuántas seguirán cerrando si esto sigue así?”
Destacó que la fuerza de Venezuela reside en la ciudadanía y no en los fusiles que contengan los destacamentos policiales o el individuo que se encuentre en el poder. “Si no luchamos por eso, no vendrá nadie para salvarnos de esto que vivimos. Debemos ser consistentes y persistentes”, aseveró el ex embajador.
“Los mismos ciudadanos hemos construido una monarquía”, comentó el fundador del portal web Analítica.com cuando mencionó que los valores de cada uno de los individuos que conforman una nación crean lo que se encuentra en el poder.
Por otra parte, alegó que la tolerancia, la solidaridad y la inclusión son fundamentales en todos los ciudadanos venezolanos, más aún cuando se vive una “crisis” como la que atraviesa el país. Recuperar los valores es el camino más viable para un mejor resultado, ya que eso a lo que llaman «viveza criolla» coloca en desventaja a la nación. Por ellos se debe empezar a construir una nueva Venezuela desde la autocrítica.
