Cuando la autoestima hace la diferencia

Madeline Stuart es una joven australiana de 18 años. Vive en Brisbane y quiere ser modelo. Como toda aspirante a este exigente oficio, asume un gran reto.

Para ella la vida no ha sido fácil, aunque siempre ha contado el apoyo decidido de su mamá Rosanne.
Maddy, como le llaman su familia y amigos, tiene Síndrome de Down. Su reto, es redefinir los estándares de belleza, y ha asumido el modelaje como una manera para que cambie la percepción de su condición. “La exposición ayudará a crear aceptación”, escribió en su cuenta de Facebook.

Sobre el logro

Hasta hace poco, Maddy tenía sobrepeso creciente. Con la ayuda del baile, la natación y los ejercicios propios de las porristas, perdió 20 kilogramos.

Esta reducción del peso, tuvo un cambio importante en el estilo de vida de la joven australiana, inyectándole renovadas energías y confianza.

No es la primera vez que nos encontramos con los beneficios de un aumento de la autoestima, cuando una joven pierde peso y se fija metas. En este caso, ser modelo y cambiar la manera en que el mundo ve el síndrome de Down y el modelaje.

“Pienso que es hora que la gente se de cuenta que personas con Down, pueden ser sexys y bellas”, señaló Rosanne.

Agregando que hace 18 años las cosas era diferentes. “Recuerdo que teniéndola a ella en el cochecito, cuando era bebé, personas cortas de mente me decían que no debía mostrarla en público”. “Sus doctores me dijeron que ella nunca lograría algo”, dijo.

“Pero las cosas están cambiando cada día y la gente está aceptando más, lo que no entienden todavía”. Rosanne espera, cuando oiga la historia de Maddy, es que mantenga “su mente abierta”.

“Gente con Síndrome de Down pueden hacer cualquier cosa. Ellos solo lo hacen a su propio ritmo”, dijo. “Denle una oportunidad y ustedes serán recompensados más allá de sus mayores expectativas”.

Fuente: BuzzFeed.com-Facebook