5 formas en que la realidad virtual puede colarse en el día a día

Se está for­man­do un gran re­vue­lo con la reali­dad vir­tual (VR). Sur­gen ar­tícu­los en las no­ti­cias y hay una gran ex­ci­ta­ción ge­ne­ral. Con ver­sio­nes com­pa­ti­bles con smartp­ho­nes, como Goo­gle Card­board y Sam­sung Gear VR ya en el mer­ca­do, ade­más del re­cien­te pre-lan­za­mien­to del Ocu­lus Rift y la in­mi­nen­te lle­ga­da del HTC Vive, una cosa es cier­ta: la reali­dad vir­tual está lle­gan­do.

Aun­que mu­chos son los que han pro­nos­ti­ca­do el éxito ca­te­gó­ri­co de la VR, otros no están tan se­gu­ros de ello. Al­gu­nos de­trac­to­res han an­ti­ci­pa­do in­clu­so que la VR será un com­ple­to fias­co, ar­gu­men­tan­do que está con­de­na­da al mismo des­tino que la te­le­vi­sión 3D.

El mayor pro­ble­ma con la te­le­vi­sión 3D fue que sen­ci­lla­men­te no había el su­fi­cien­te con­te­ni­do para per­sua­dir a los con­su­mi­do­res mains­tream de que com­pra­ran las nue­vas te­le­vi­sio­nes tan caras (por no men­cio­nar que la tec­no­lo­gía era im­per­fec­ta en el mejor de los casos). Siem­pre per­ma­ne­ció como un nicho de ries­go. Pero este no es el caso de la VR. Ya hay infinidad de aplicaciones relacionadas con el tema. A continuación se presentan cinco de las me­jo­res:

1. Con el nuevo Google Street View VR app, la persona se puede teletransportar a cualquier sitio del mundo

Pa­sear por el Bu­le­var Saint Mi­chel (París) en la vida real sigue su­peran­do cual­quier apro­xi­ma­ción a esa ex­pe­rien­cia a la que se pueda as­pi­rar con una pan­ta­lla HD. Sin em­bar­go, a menos que real­men­te se gaste una buena suma de dólares en com­prar un bi­lle­te para dar la vuel­ta a Eu­ro­pa, la app Goo­gle Street View (ac­tual­men­te dis­po­ni­ble para dis­po­si­ti­vos an­droid con Goo­gle Card­board o Gear VR) es una ex­pe­rien­cia casi tan rea­lis­ta y ge­nui­na como la que se po­dría tener en otra ciu­dad.

2. Ver películas en la luna en una pantalla de 1.700 pulgadas

Ocu­lus Ci­ne­ma es una app que per­mi­te ver pe­lí­cu­las y otros con­te­ni­dos de video como si se es­tu­vie­ra en un cine, una sala IMAX o en la luna. La luz de la pan­ta­lla de cine lanza rocas lu­na­res al­re­de­dor y si se gira a la de­re­cha, podrá verse el ate­rri­za­je de la Apolo en la luna.

Esto es real­men­te ge­nial, por­que re­crea con pre­ci­sión la agra­da­ble sen­sa­ción de estar en el cine mien­tras la persona se con­cen­tra en ver una pe­lí­cu­la. Igual que en el cine, está os­cu­ro y no se pue­de bajar la mi­ra­da al móvil para ver la pun­tua­ción del juego –que es lo bueno del cine en un prin­ci­pio: es­ca­par de la vida mun­da­na y su­mer­girse en la his­to­ria de la pe­lí­cu­la. Ocu­lus tam­bién acaba de anun­ciar que vie­nen ami­gos a su cine; se ha aña­di­do una fun­ción so­cial a la app que per­mi­te que varias personas se sien­ten en el mismo cine (o parte de la luna).

3. Asistir a espectáculos en vivo, como la grabación de SNL

Para el epi­so­dio con­me­mo­ra­ti­vo de su 40 aniver­sa­rio, Sa­tur­day Night Live co­lo­có una cá­ma­ra a 360º den­tro del Stu­dio 8H para que la gente con un te­lé­fono con an­droid y Goo­gle Card­board pu­die­ra ver a Will Fe­rrell como Alex Tre­bek en «Ce­le­brity Jeo­pardy», en VR. Ellos tam­bién po­dían mo­ver­se por allí y ob­ser­var a las cá­ma­ras o a los miem­bros del pú­bli­co, entre los que se in­cluían Mi­chael Dou­glas, John Good­man, James Fran­co, Larry David, Tim Mea­dows, Da­ko­ta John­son y Sarah Palin. Este tipo de apli­ca­ción VR real­men­te añade una di­men­sión a SNL (y a otros shows) que en un pri­mer lugar es­ta­ba re­ser­va­da para gente que tenía la gran suer­te de poder asis­tir real­men­te a las se­sio­nes en vivo.

4. Interactuar con otras personas a través de la red social AltspaceVR

Lan­za­da solo hace unos días, Al­ts­pa­ceVR per­mi­te com­par­tir e in­ter­ac­tuar real­men­te con otras per­so­nas den­tro de los es­pa­cios de la reali­dad vir­tual. Tanto si está ju­gan­do al aje­drez como si está sen­ta­do en una cá­li­da ca­bi­na de un in­ver­nal es­ce­na­rio in­com­pa­ra­ble vir­tual, esta nueva pla­ta­for­ma per­mi­te tener ex­pe­rien­cias en común con gente que puede estar a miles de ki­ló­me­tros. Al final, la base de la amis­tad es la po­si­bi­li­dad de ha­blar, tener ex­pe­rien­cias en común, jugar jun­tos y salir. Al­ts­pa­ceVR llega a con­se­guir esto y ver­da­de­ra­men­te da rien­da suel­ta a un enor­me po­ten­cial de so­cia­li­za­ción a tra­vés de la VR. Está aún en una fase tem­pra­na, pero se está la­bran­do el ca­mino hacia una re­vo­lu­ción en las redes so­cia­les.

5. Estar dentro del juego en lugar de solo mirarlo… ¡y hasta hacer ejercicio!

La gente puede disfrutar el Tour de Francia, mientras hace un poco de entrenamiento. Esto puede lograrse al unir Vir­Zoom y ebove B de Ac­ti­vain­ment.