Mi vida es una sola nota: Gulda, Jazz, Cigala y algo de mi infancia
Un CD que me sorprendió mucho es “Gulda plays Bach” un álbum excepcional que trae tanto grabaciones en vivo como en estudio de ese gran pianista que es Friedrich Gulda, entre las piezas están la suite inglesa n0 2 y 3, la tocata en do menor BWW 911, y otras así como su propio preludio y fuga. Su interpretación de Bach me parece más apasionante que la de Gould y está para mi en el mismo nivel de la de Lipatti o quizás aún superior. En la caratula del CD Martha Argerich dice” I never knew anyone so gifted or extraordinary” y no se queda corta con su elogio.
Cambiado de música y retornando al azar pesqué un disco que no recuerdo haber escuchado se trata de Jazzsamba , que como su nombre lo indica es un disco de jazz con sabor brasileño, entre los interpretes están: Dom Um Romao, Edison Machado, Luis Carlos Vinhas, Meireilles e os copas, Moacir Santos, Paulo Moura, Rau de Souza, Rio 65 Trio, Tamba Trio, Tenorio Jr., Victor Assis Brasil. Esta bien aunque no es uno de mis discos favoritos.
El otro CD que escuché es excelente se trata de Picasso en mis ojos de Diego el Cigala una estupenda selección de tangos, bulerías, rumbas y fandango esta acompañado por Paco de Lucia y Tomatito y Raimundo Amador. A mi siempre me ha gustado la música flamenca, recuerdo de muchacho haber ido al corral de la morería, al duende y a la zambra. Fue un época en que mis padres vivían cerca del retiro, en Alfonso XII, muy cerca del famoso Horsher, restaurant famoso para la época y que se decía manejaba el antiguo cocinero de Goering. El apartamento de mis padres era inmenso, todo un piso. Recuerdo que a mi padre y sus amigos les encantaba ir al Riscal que era algo así como un burdel de lujo y si no a la peña del Hotel Velázquez, donde entre otros se aparecía de vez en cuando el famoso torero Joselito.
Acabo de poner un disco espantoso los bellos valses de Antonio Lauro, estropeados por un arreglo edulcorado para la orquesta sinfónica de Madrid. Ese disco no lo compré fue un regalo de la CVG bajo la presidencia de Francisco Rangel Gómez a quien conocí en una ocasión de un viaje a Paris con motivo de la firma de un financiamiento del Banco Indosuez a Bauxilum. Hasta el valse Natalia, que tanto me gusta, es inaudible. Por cierto Natalia Lauro estudió con Susana mi primera esposa y muchas veces fue al Patricia que es donde vivíamos en ese entonces, en Chuao y creo que ella vivía cerca. Antonio Lauro fue el director del coro que teníamos en el colegio Santiago de León de Caracas. La verdad es que no nos dábamos cuenta de la calidad de los profesores que tuvimos en ese entonces, gente del calibre del dr. Rafael Vegas, Amílcar Plaza, Servando García, Diana Zuloaga, y muchos más del mismo nivel, y el profesor de natación era Alfonso Vitoria.