¡¡EXORCISMO!!
Ayer, domingo 23 de mayo de 2004, afortunados por asistir al concierto del Festival Beethoven de la
(%=Link(«http://www.teatroteresacarreno.com/webteresa/site/teatro/orquesta_simon.htm»,»Sinfónica de la Juventud Venezolana Simón Bolívar»)%) en la Sala Ríos Reyna del Teatro Teresa Carreño de Caracas, pudimos constatar qué es y en qué consiste la auténtica revolución venezolana y cuáles son sus emblemáticos símbolos del momento.
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La auténtica revolución venezolana es un poner en acto inmensas potencialidades de desarrollo humano de todo un pueblo; consiste en demostrar sus reales posibilidades de saber y de hacer en grados de excelencia.
La auténtica revolución del pueblo venezolano muestra largos elencos de nacionales de este país que simbolizan, en sus propios logros personales o de grupo, la inmensa capacidad de esta Nación para alcanzar cimas en diversos campos de la cultura, esto es, en construir lo que el ser humano realiza para oponer a su originaria morada natural: cimas en las artes, en las técnicas, en los deportes, en las ciencias, en fin, en todos los campos por los que el hombre se aventura a preguntar para conocer y a actuar para hacer.
En la Sala Ríos Reyna, constatamos el desplegarse de esas capacidades humanas en la impecable dirección orquestal de un joven barquisimetano de apenas 23 años, Gustavo Duhamel, también compositor y solista del violín, cuya fulgurante carrera artística, iniciada en ese fenómeno venezolano único en el mundo que es nuestro Sistema Nacional de Orquestal Juveniles e Infantiles, logró hace poco el primer lugar en la Competencia para Directores Gustav Mahler patrocinada por la Orquesta Sinfónica de Bamberg, después de haber actuado, por segunda vez, como invitado de la Orquesta Filarmónica de Berlín en sus temporadas sinfónicas de primer nivel internacional. Fue impecable la conducción de este joven maestro, cuyo futuro se avizora no sólo al verlo en el podio con manos que vuelan y parecen desgranar notas y acordes o recoger alguna furtiva fusa rezagada, como distraída mientras flota en el aire, sino que se constata su propio sello en partituras magistralmente entendidas sin menoscabo de fidelidad hacia el genio del compositor.
Si Duhamel fue símbolo no menos lo fueron (%=Link(«http://www.recoveco.net/recoalexises.htm»,»Alexis Cardenas»)%), (%=Link(«http://www.eluniversal.com/2004/05/18/18256C.shtml»,»Gabriela Montero»)%) y William Molina. Cárdenas, joven violinista graduado con primer premio en el Conservatorio Nacional Superior de Música de Paris y de brillante carrera internacional en escenarios de Europa, Asia y América; Gabriela Montero, pianista, desde la edad de cinco años ha acumulado premios en concursos nacionales e internacionales hasta merecer la calificación de gran pianista, en expresión de un famoso crítico como Harold Schoenberg del New York Times; William Molina, violoncellista, muestra una página curricular extraordinaria, también primer premio del Conservatorio Nacional Superior de Música de Paris. Estos jóvenes ejecutaron magistralmente el Triple Concierto para violín, violoncello, piano y orquesta en do menor (opus 56) de Beethoven, mientras Montero y Cárdenas regalaron una magistral improvisación en difícil motivo de música venezolana.
Los integrantes todos de la Orquesta son símbolos de esa Venezuela indetenible. Suss caras de niños que aún conservan esconden singulares virtuosismos; estudios y dedicación en el cultivo del arte; seriedad y tenacidad. Y, sin dudas , ese símbolo de la auténtica revolución venezolana: (%=Link(«http://analitica.com/vas/1999.08.4/articulos/18.htm»,»José Antonio Abreu»)%), padre del milagro de las orquestas infantiles y juveniles de Venezuela, incansable en esfuerzos denodados, desprendido y constante. Ejemplo de imitar y guía insustituible para la conducción de este país hacia sus mejores logros.
En ambiente emocionado y exultante, fue propicio el pensar en nuestra patria. Esta es Venezuela, comentábamos. Pero es, además, la (%=Link(«http://www.eluniversal.com/2004/05/22/22205F.shtml»,»Vinotinto»)%); es (%=Link(«http://www.sumate.org/quienes_somos.html»,»Súmate»)%); son (%=Link(«http://rorrobb.blogspot.com/2004/04/miguelito-cabrera-el-prospectazo.html»,»Miguelito Cabrera»)%)
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(%=Link(«http://magallanes.tripod.com.ve/biomora.htm»,»Melvin Mora»)%), Maglio Ordóñez y ese centenar y más de muchachos que brillan en las Grandes Ligas; son nuestros científicos, nuestros médicos, nuestros juristas, nuestros ingenieros; nuestros profesionales en todos los campos; son nuestros empresarios e industriales; nuestros técnicos y operarios; nuestros trabajadores, en fin, nuestra gente toda que cada día, con sus actos y hechos, está diciendo que no vamos a retroceder al pasado que quedó atrás, con sus beneficios y desventajas, con sus aciertos y errores; que no volveremos al siglo XIX; que Venezuela, más allá de sus dificultades presentes, está lanzada a la conquista del tercer milenio.
Ayer, en el (%=Link(«http://www.mipunto.com/venezuelavirtual/temas/2do_trimestre02/teresa.html»,»Teatro Teresa Carreño»)%), el arte y el genio exorcizaron la Sala de malos efluvios de odio, rencores, violencia, intolerancia, sectarismo, estrechez mental, mediocridad, incapacidad, improvisación, ignorancia. Entre cuerdas y maderas, vientos y timbales fueron expulsadas las miserias y acompañadas las grandezas. ¡ Gloria al Bravo Pueblo!
