«Creo que este premio será bien recibido en mi país donde hemos tenido muchos problemas en los últimos años. Espero que este premio ayude un poco. Estoy seguro de que vamos a dialogar entre nosotros para salir adelante. ¡Que viva Venezuela!», declaró en inglés al dedicar el premio a su país.
Un premio que fue toda una sorpresa ya que no estaba entre los favoritos para hacerse con el León de Oro, reseñó EFE
«Es la primera vez en la historia que tenemos un filme (de Venezuela) en Venecia«, dijo Vigas emocionado.
La película, que ilustra los conflictos y las diferencia sociales, está marcada por un ritmo lento, los silencios y contrastes entre un mundo íntimo árido y otro externo vital.
Aplaudida por la prensa especializada en su primer paso, dividió al público, pero sobre todo convenció al jurado presidido por el mexicano Alfonso Cuarón, reseñó la AFP.
El realizador quiso resaltar la generosidad del guionista y director mexicano Guillermo Arriaga, que le ayudó a escribir el guion y le hizo «llegar al límite», y a los productores que le acompañaron en este proyecto, entre ellos el realizador mexicano Michel Franco, así como, Gabriel Ripstein o Rodolfo Cova, además del trabajo del actor chileno Alfredo Castro.
Y recordó a su padre, Oswaldo Vigas, «uno de los artistas más importantes de Latinoamérica»