VIH podría duplicar las probabilidades de ataque cardíaco
A medida que la vida de las personas con el VIH se alarga, surgen nuevas preocupaciones, como un riesgo de ataque cardiaco que es hasta dos veces más alto que para las personas sin el virus que provoca el SIDA, informa un nuevo estudio publicado en la revista JAMA Cardiology.
Fuente: Med Line Plus
Ese aumento en las probabilidades se observa incluso en las personas cuyo virus se ha suprimido hasta niveles indetectables en la sangre mediante antirretrovirales, señalaron los investigadores.
Este riesgo más alto tiene varios motivos, dijo el investigador líder, el Dr. Matthew Feinstein, cardiólogo de la Facultad de Medicina Feinberg de la Universidad de Northwestern, en Chicago.
«Un factor clave parece ser la inflamación crónica asociada con el VIH que persiste incluso cuando no hay virus detectable en la sangre».
Feinstein explicó que el riesgo de enfermedad cardiaca y accidente cerebrovascular (ACV) es más alto «porque el virus mantiene reservas en los tejidos del cuerpo, provocando una respuesta inflamatoria e inmunitaria crónica que puede conducir al desarrollo de placa inflamatoria, y en última instancia a ataques cardiacos y ACV».
Además, la acumulación de placa sucede de 10 a 15 años antes en los pacientes de VIH que en las personas sin la infección, dijo Feinstein.
«La capacidad de predecir el riesgo de ataque cardiaco y ACV es esencial», enfatizó. Pero añadió que la mejor manera de hacerlo aún no está clara, y que es ahí donde el nuevo estudio interviene.
Si ese riesgo se puede predecir de forma precisa, entonces los pacientes pueden ser tratados con fármacos que reducen el riesgo, como medicamentos que reducen la presión arterial y el colesterol, planteó Feinstein.
«Cuando las personas tienen unos riesgos más altos de ataque cardiaco o ACV, el beneficio potencial de uno de esos medicamentos es mayor y puede justificar sus posibles efectos secundarios. Pero todavía nos falta trabajo con el fin de averiguar la mejor forma de predecir el riesgo cardiaco en el ámbito del VIH».
Según Feinstein, un estimado de 1.2 millones de estadounidenses tienen el VIH, al igual que alrededor de 35 millones de personas en todo el mundo.