Una aplicación digital dispara los donantes de órganos en China
El número de donantes de órganos en China se disparó en diciembre pasado gracias al lanzamiento de una aplicación digital creada por el gigante financiero Alipay, hasta cerrar 2016 con 100.000 inscritos, anunciaron hoy las autoridades chinas.
«Tan sólo en diciembre de 2016, 10.000 personas se inscribieron como potenciales donantes de órganos en la plataforma de Alipay», afirmó hoy el vicesecretario de la Fundación de Trasplantes de Órganos de China, Zhao Hongtao, en una rueda de prensa organizada por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
«Se trata de una gran noticia, si tenemos en cuenta que en los dos últimos años, entre 2014 y 2016, el total de registros sólo llegó a 80.000», añadió.
China realizó en 2016 un total de 4.000 trasplantes, el doble que en el año anterior, pero alrededor de 300.000 pacientes anuales necesitan un trasplante en este país.
Zhao aseguró que el principal desafío al que se enfrenta China hoy es mejorar la educación pública en este campo para conseguir más donantes, no sólo a través de las aulas, sino de buenas campañas de promoción y el «sólido apoyo» de los medios de comunicación.
Zhao coordina el proyecto «Love and Hope» (Amor y Esperanza) que la plataforma de pago en línea Alipay – parte del gigante del comercio electrónico chino Alibaba- lanzó a finales de 2016 con el respaldo de la Comisión Nacional de Salud y Planificación Familiar.
«Los usuarios de Alipay pueden registrarse fácilmente como potenciales donantes cuando introducen sus datos personales para realizar un pago, y posteriormente la fundación recopila y verifica la información», explicó Hou Fengzhong, subdirector de la fundación.
El representante de la OMS en China, Bernhard Schwartländer, explicó a Efe que «el sistema se basa ahora en la transparencia y en la donación voluntaria», por lo que el objetivo actual es conseguir «suficientes órganos para ayudar a los que lo necesitan».
Schwartländer apuntó también a otro problema, ya que en China hay enfermos que necesitan un nuevo órgano pero carecen de recursos económicos para pagar las intervenciones, y «por eso es tan importante reforzar el sistema sanitario y las coberturas sociales».
Aunque durante años los presos ejecutados eran la principal fuente de órganos para trasplantes en China, una práctica que terminó oficialmente a principios de 2015, tanto la OMS como los responsables de la fundación recalcaron hoy que «los voluntarios se han convertido en la única fuente de trasplantes».