¿Qué experimentan los hijos cuando se acaba el matrimonio?
Un divorcio no es nada fácil para una familia y menos cuando hay niños o adolescentes involucrados.
Cada chico ve la separación desde su perspectiva y las emociones cambian según la edad. Todos los sentimientos están asociados a la tristeza y a la pérdida, por ello es importante que los padres acompañen ese proceso de la mano de un especialista que los guie, como un médico de familia, consejero o psicólogo.
Depende de como la familia logre superar esa separación quedarán traumas o no en los niños.
“Los hijos pueden presentar diversas reacciones cuando los padres se separan o se divorcian”, advierte el Juan Nascimento Thomas, quien además de pediatra es psicólogo.
El especialista refiere que, entre los 3 y 5 años de edad, los niños se creen culpables del proceso de separación de los padres y temen quedarse solos y abandonados. La edad más difícil, es la de 6 a 12 años ya que sienten la angustia y el dolor, pero no saben cómo expresarlo.
Los niños creen y aspiran que los padres superen ese problema y presionan para lograr esos objetivos, lo que hace más compleja y difícil la situación.
En el caso de los adolescentes “experimentan miedo, soledad, depresión y culpabilidad. Dudan de su capacidad para relacionarse afectivamente, casarse o mantener una relación’’, destaca el pediatra.
Por ello, el especialista considera que es fundamental una adecuada orientación antes de establecerse el proceso de separación, régimen de visita, disciplina y manejo de los afectos.
Los maestros no pueden estar ajenos a este problema y es necesario que también puedan apoyar emocionalmente al niño o adolescente que esté atravesando por esta situación.
En cifras
Según las últimas investigaciones, el promedio de duración de un matrimonio actual es de 7 años y una de cada 2 uniones termina en divorcio.
El 75% de las personas que se divorcian se vuelven a casar y el 66% de las parejas de segunda unión con hijos de su primer matrimonio, se separan.