Investigan un nuevo tratamiento contra enfermedades parasitarias
Científicos estadounidenses han identificado un nuevo tratamiento que puede ser eficaz para combatir enfermedades parasitarias que causan más de 50.000 muertes al año en el mundo, según un estudio publicado por la revista Nature.
El fármaco, desarrollado por investigadores del Instituto de Genómica de Novartis en Estados Unidos, ha demostrado su efectividad en ratones para el chagas, la leishmaniosis y la tripanosomiasis africana, enfermedades que afectan a 20 millones de personas, en especial en comunidades pobres de América Latina, Asia y África.
Los parásitos que causan las tres enfermedades son similares, por lo que el grupo de investigadores estadounidenses trató de identificar una proteína común a todos ellos que pueda servir como objetivo de un único medicamento.
Tras evaluar cerca de tres millones de candidatos, los científicos hallaron un compuesto viable, llamado GNF6702, capaz de bloquear de forma selectiva la actividad de los parásitos.
Si bien existen tratamientos para el chagas, la leishmaniosis y la tripanosomiasis africana, éstos son caros, tienen efectos limitados y son mal tolerados por algunos pacientes, problemas que el nuevo compuesto aspira a mitigar.
«Se trata de un paso adelante en nuestra comprensión de los parásitos que causan esas tres enfermedades y que, potencialmente, nos permitirá curarlas», afirmó Jeremy Mottram, uno de los científicos involucrados del estudio.
«El proyecto se encuentra en una fase temprana, en la que hemos descubierto la sustancia. Ahora avanzaremos hacia las pruebas toxicológicas, antes de comenzar los exámenes en humanos», detalló Mottram.
Se contagian por un parásito
Se calcula que 120 millones de personas están en riesgo de contraer chagas, una enfermedad de la que se detectan 300.000 nuevos casos al año.
La infección provoca en una primera fase fiebres e hinchazón de los nódulos linfáticos, unos síntomas que pueden degenerar en un cuadro severo y provocar la muerte si no son tratados.
Los pacientes infectados por el parásito suelen pasar por una fase asintomática de meses o años en la que pueden quedar dañados órganos como el corazón y el sistema digestivo.
La leishmaniasis produce unos dos millones de casos anuales en 88 países, especialmente en zonas en desarrollo, medio millón de los cuales implica un riesgo de muerte para los pacientes.
La tripanosomiasis africana, conocida como la enfermedad del sueño, de la que se detectan más de 500.000 casos al año, puede provocar desórdenes neurológicos y endocrinos, así como la muerte si no es tratada.