Tres alternativas a la leche de vaca
Hay personas que no toleran la leche de vaca pues el intestino delgado no produce suficiente cantidad de lactasa, la enzima requerida para digerirla o simplemente son veganos. Sin embargo, hoy en día existen alternativas para quienes no desean privarse de consumir la bebida láctea en su dieta.
Para muchos especialistas, el consumo de leche debería ser sólo durante la infancia. Pero el hecho de aportar calcio al organismo y otros beneficios hace de su consumo un hábito difícil de obviar en la alimentación.
Si se es intolerante a la lactosa o se mantiene un régimen vegetariano estricto del tipo vegan, las opciones descritas a continuación pueden ser buenos sustitutos ricos en nutrientes y de fácil digestibilidad. En todo caso, si no se elaboran en casa conviene revisar las etiquetas de la leche de soja, coco o almendras que en algunos casos pueden tener edulcorantes añadidos, conservantes, vitaminas sintéticas e incluso sabores artificiales.
Leche de soja
La leche de soja es la más popular actualmente. La soja se remoja en agua y después se tensa. Es rica en proteínas y no contiene colesterol. Pero suelen contener muchos conservantes y saborizantes artificiales.
Leche de coco
La leche de coco proviene de la carne rallada de este fruto. Sus propiedades benéficas son enormes. Es preferible hacerla en casa. Si se opta por las versiones industrializadas es mejor escoger la que no tenga edulcorantes añadidos, ni conservantes.
La leche de almendras
La leche de almendras se hace como la leche de soja y tiene un sabor como a nueces. Es más ligera que la leche de soja. Si es procesada podría contener carragenina que es tóxico e inflamatorio para el sistema digestivo. En cualquier caso, es recomendable hacerla uno mismo.