Roberto Koenig: “El momento para emprender es hoy”
Él es oriundo de la ciudad “pachanguera” de Colombia: Cali; pero se ha vuelto más venezolano que el pabellón criollo. Roberto Koenig llegó a este país cuando tenía 20 años, y luego de trabajar en una compañía dedicada al negocio de las lozas, decidió fundar su propia empresa. Así fue como en abril de 1980 abrió sus puertas Prosein, “los expertos en cerámica”, como profesa su eslogan.
“Recuerdo que en ese primer año nos pusimos como meta no ganar nada, sino mostrarnos como una corporación que brinda excelente servicio”, afirma el colombiano. Y aunque los retos no tardaron en aparecer, logró superar cada obstáculo y posicionar su consorcio hasta el escalafón que ostenta en la actualidad.
Para Koenig, el momento ideal para emprender es hoy. “Siempre va a ser hoy: hace 36 años fue hoy, hace 20 años fue hoy, hace 10 años fue hoy, hoy es hoy y dentro de 5 años será hoy. Si crees ciegamente en ti, podrás llegar a donde tú quieras”.
Eso sí, aclara que es necesario tener los pies sobre la tierra, plantearse metas reales y jamás olvidar un principio básico: “Los clientes son los dueños de tu negocio. Sin ellos, no eres nadie”. Y en toda su travesía se ha dado cuenta que el universo de los usuarios es equivalente a un zoológico. “Te lo explico de esta manera: hay algunos que son como pajaritos y otros que parecen culebras”.
Pero a pesar de esos clientes “complicados”, afirma que la gran mayoría de ellos son parte de sus seres queridos. “Si tuviera que hacer un listado de mis 50 mejores amigos, 46 serían constructores que empezaron siendo clientes”. Es que su visión de negocio se basa en convertirse en el aliado de sus beneficiarios, y eso le ha ayudado a expandir la corporación.
Ese manejo interpersonal tan cercano lo trae de su casa. De hecho, explica que siempre procura que las cosas estén bien en su hogar, “para poder ocuparme con tranquilidad de mis otras obligaciones”. Es padre de 4 hijos y tiene 5 nietos.
-¿Siempre tuvo la visión de que Prosein llegaría al lugar en el que está actualmente?
-No lo pensé. Yo siempre digo que si uno va a soñar, debe hacerlo en grande, pero nunca imaginé que alcanzaría este punto.
-¿Qué proyectos tiene con su empresa para lo que queda de 2016?
-En este momento, sobrevivir a una situación que todos conocemos. Seguimos invirtiendo, pero no queremos arriesgarnos con muchos proyectos, porque no creo que sea el momento para eso.
-Según su opinión, ¿qué estrategias deberían implementarse para poder solventar la situación país?
-Para mí, la medida necesaria es dolarizar la economía, incluyendo los sueldos. Yo siempre he tenido claro que si nosotros tenemos a la gente ganando sueldos decentes y normales, tendremos un gran país. Algo que repito desde hace más de 20 años es que una nación con sueldos de miseria, es una nación de miseria.
-¿Por qué sigue apostando por Venezuela?
-Porque este país me ha dado todo, y yo tengo doble obligación de retribuirle tanto amor, porque sin ser de aquí me abrió sus brazos.
-Si no fuera director de Prosein, ¿a qué se dedicaría?
-Creo que sería director técnico de alguna selección de fútbol.
-Para usted, ¿cuál es la clave del éxito?
-Desde el punto de vista empresarial, la base de una organización está en el apoyo y la inversión hacia todos los empleados y nunca traicionar los principios.
-Por último, ¿cómo sabe que va por el camino correcto?
-Todos los días me lo cuestiono. Creo que la autocrítica es sinónimo de humildad y esta a su vez es sinónimo de grandeza. Si no eres humilde y crees que te la sabes todas, te estrellarás.