Para dejar de fumar: El cigarrillo electrónico gana espacio en el mundo
La época en que un cigarrillo era sinónimo de estilo y buena vida quedó atrás hace mucho, pero mucho tiempo. Hasta los años 80’s era natural, incluso en series de TV y films cinematográficos, ver a sus protagonistas con glamorosos trajes y un cigarrillo en sus dedos.
Pero los avances en las investigaciones científicas que comenzar a advertir con más fuerza los daños que fumar causa a la salud y las campañas mundiales para disminuir el consumo de tabaco imprimieron en nuestras vidas un cambio en este sentido.
Aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS), advierte que todavía son millones los que consumen cigarrillos y recuerda que estos tienen efectos dañinos no solo para los fumadores activos, sino también para el entorno, cada vez son menos quienes fuman.
La imposición de normas sociales, que se han extendido por todo el mundo, como la creación de espacios libres de humo y la prohibición de fumar en espacios cerrados como oficinas, restaurantes, bares y muchos otros sitios han contribuido.
Sin embargo, no es suficiente porque dejar la dependencia al tabaco y la nicotina no es cosa fácil. Se trata, en fin de cuentas, de una adicción. De ahí que se hayan aparecido en el mercado distintas alternativas como chicles, parches y más recientemente, aunque no tanto, los vapeadores o cigarrillos electrónicos.
Cambio de hábito
La aparición en el mercado mundial de los cigarrillos electrónicos ha significado para muchos una alternativa y pese a que médicos y especialistas han hablado de sus contraindicaciones, los vapeadores son cada vez más, la opción para quienes están decididos, al menos, a reducir los daños del hábito de fumar.
Las mejores estimaciones demuestran que los cigarrillos electrónicos son un 95% menos perjudiciales para su salud que los cigarrillos normales,» de acuerdo a un informe de Salud Pública de Inglaterra, una división del Departamento de Salud del Reino Unido.
El mismo estudio indica que cuando el vapeo “se apoya en un servicio para dejar de fumar, ayuda a la mayoría de los fumadores a dejar el tabaco por completo”. El profesor Peter Hajek, uno de los autores de este trabajo explica que hay evidencia de que “los fumadores que se cambian al vapeo eliminan casi todos los riesgos que supone fumar para su salud”.
Humo blanco con estilo
El crecimiento del mercado de los cigarrillos electrónicos o vapeadores para dejar de fumar ha crecido tanto que casi la totalidad (el 90%) de quienes lo consumen lo hacen con este fin y de ahí que los fabricantes hayan comenzado a imprimirles estilo.
El humo blanco que expiden los caracteriza y ya los hace reconocibles, los vapeadores lucen cada vez con más frecuencia llamativos y coloridos cigarrillos electrónicos que incluso varían de tamaños y formas y van más allá porque ofrecen hasta kit especializados para aquellos se inician en este mundo.
Además, estos vapeadores se consiguen en tiendas especializadas tanto físicas como virtuales y sus precios varían de acuerdo a las posibilidades económicas de cada quien y que oscilan entre los 12 euros y los 40 de acuerdo a sus características, marca y especificaciones técnicas como la capacidad de su batería y otras.
Aunque los daños de los que advierten la OMS y algunos expertos investigadores no están del todo claros, es bueno recordar que siempre es mejor dejar de fumar, aunque se trate de vapor, porque al final estamos inhalando e introduciendo a nuestro organismo sustancias que pueden causar daños a nuestra salud.
