Un llamado a la sensatez
Tras los resultados –poco claros- del referendo consultivo sobre el territorio Esequibo, el jefe del régimen venezolano, Nicolás Maduro, anunció sobre la disputa territorial, que “Vamos a iniciar una nueva etapa, poderosa, porque llevamos el mandato del pueblo”.
A la espera del anuncio de esas medidas, hacemos votos porque haya una lectura sosegada y sensata, no sólo de los resultados de la consulta, sino del interés nacional.
Esta reclamación se encuentra en una fase culminante. La posición venezolana es que el Laudo Arbitral de París, que pretendió fijar los límites entre Venezuela y la entonces Guyana Británica (hoy, República Cooperativa de Guyana), es nulo e írrito. La única posibilidad que se tiene de conseguir una salida favorable, es la presentación de una contramemoria impecable ante la Corte Internacional de Justicia en abril próximo.
Que el interés electoral no nos haga abandonar la única vía disponible y nos lleve por caminos inciertos y así renunciar a la defensa jurídica y cívica de lo que en justicia es nuestro.