Negociar sí, pero ¿cuándo?
La negociación es una herramienta fundamental para la resolución de controversias en cualquier ámbito. Sin embargo, no todas las negociaciones han tenido éxito a lo largo de la historia. En este sentido, es importante destacar aquellas que han resultado exitosas y analizar los factores que las han llevado a buen puerto.
Un ejemplo de negociación exitosa fue la llevada a cabo por Nelson Mandela y Frederik de Klerk, que permitió poner fin al régimen del apartheid en Sudáfrica. Asimismo, el Acuerdo de París sobre el clima de 2015, en el que participaron representantes de 195 países, es otro ejemplo de negociación efectiva que estableció un marco global para combatir el cambio climático.
En Chile, después del referéndum de 1988 en el que Pinochet perdió el poder, se llevaron a cabo complejas negociaciones entre los militares y la oposición democrática para establecer un proceso de transición hacia la democracia. A pesar de los objetivos divergentes de ambas partes, se logró firmar el acuerdo Alwin-Pinochet en 1989, que estableció las condiciones para la transición a la democracia.
Es importante destacar que en el caso chileno, la oposición estaba unida y representada por líderes fundamentales, mientras que en Venezuela aún no se ha logrado una unificación clara. Por ello, resulta fundamental que cualquier negociación que se lleve a cabo tenga en cuenta el apoyo y reconocimiento popular, especialmente de aquellos que participen en las primarias y de quien obtenga la nominación a la candidatura presidencial en 2024 a través del voto popular.
No hacerlo podría llevar a una negociación fallida, como ha ocurrido en el pasado con tratados como el de Versalles de 1918, que impuso condiciones draconianas a Alemania y contribuyó al surgimiento del fascismo en Italia y Alemania, así como al estallido de la Segunda Guerra Mundial.
La negociación es una herramienta poderosa para resolver conflictos, pero su éxito depende de diversos factores, entre ellos la unidad y representatividad de las partes involucradas y el apoyo popular.