La visita de los ex Presidentes
En la historia universal hay hechos o circunstancias que modifican el rumbo de lo que se daba por establecido para siempre. En el caso nuestro, no fue la visita de los ex presidentes Piñera, Pastrana y Calderón lo que lo logró, sino la torpeza insólita con la que el gobierno manejó el tema de la visita de dos de ellos a Ramo Verde. Un caso parecido, guardando la distancia, fue el de Napoleón y la orden que impartió de fusilar a quien era la cabeza visible de la oposición monárquica, el Duque de Enghien, una vez que fue capturado en los Países Bajos. En esa oportunidad, el cínico y brillante Tayllerand le dijo a Napoleón: » Majestad, lo que usted ha hecho es peor que un crimen, es un error».
Lo que hizo el vicepresidente Arreaza, de prohibir el acceso a los presidentes amigos de Leopoldo López, en un día de visita normal, no solo fue un error, sino que logró destruir la imagen presuntamente democrática del régimen, al permitir que la fuerza militar “jamaqueara”, nada menos que a un ex presidente de la hermana república de Colombia. Esa foto hoy recorre el mundo entero.
Otro error fue el cometido por Maduro al pretender descalificar a los ilustres visitantes, lo que produjo una respuesta ponderada e inteligente de cada uno de ellos, en la que pusieron en evidencia su desconocimiento de la realidad latinoamericana y de la práctica de las buenas costumbres diplomáticas.
Cómo bien dijo el gran Canciller francés: en política es mucho más grave un error, que un crimen.
No podemos afirmar que vivamos en un país ´´normal´´ sino esencialmente anómico por naturaleza. No estamos en ´´guerra´´, pero se producen miles de muertos como si estuviésemos en una ; hablamos de ´´´país potencia´´ y no se consigue ni una aspirina ; se habla de ´´ética revolucionaria´´ y estamos ´´cundidos´´ de narcotraficantes dirigiendo la Alta Política del Estado – gobierno ; y, hablamos de democracia cuando en realidad estamos frente a un sistema ´´dedocrático´´ que quita y pone a su buen saber y entender.
Una visita de minutos a un preso político por parte de unos ex presidentes se ha transformado en un drama político y casi que genera un conflicto internacional, porque el Vice- presidente Arreaza siguió instrucciones de sus amos naturales y se levantó con el pie equivocado, poniendo en evidencia lo instintivo y viscerales de las decisiones de gobierno y la forma como nunca se ´´planifica´´ y siempre se improvisa. Un régimen que así se comporta, está condenado al fracaso.
Un error político garrafal que tan solo ha servido para encrespar la animadversión en contra de Venezuela y su gobierno errático, y en lo interno tirarle ´´arenita´´ a la gradería para desviar la atención de los graves problemas que aparentemente son incapaces de encontrarles alguna solución. Y es que en este Estado fallido y forajido, no hay posibilidad alguna de redención ; todo lo contrario, se ahoga en el lodazal profundo de sus contradicciones y errores llevándose por delante a toda una nación sin importarles las consecuencias. Y es que colocándonos en perspectiva, rehacer nuestro país y reconstruir el complejo edificio de las relaciones internacionales pasa por construir desde sus cimientos nuestra Cancillería que hoy no pasa de ser un ´´muladar´´y un antro de mala muerte, que fenece entre la mengua y las intrigas palaciegas de poca monta que nos han conducido al presente estado de descrédito y confusión. La tarea por venir es ingente y solo abordable por verdaderos expertos en la materia y con larga experiencia en el campo diplomático…¡ No queda otra !.
Por mi parte, quiero felicitar a toda la cúpula del «gobierno» venezolano. Con el trato dado a los expresidentes, han demostrado hasta la saciedad ser ZOOCIALISTAS. La torpeza de Maduro y sus lacayos no tiene parangón en la historia díplomatica de Venezuela. Paz a sus restos.
Quienes son aficionados a echar o escuchar chistes, saben que a José Antonio Páez, nuestro prócer llanero, lo tomaron de sopa para personificar al bruto y torpe en cualquier reunión social. Una injusticia, pues siendo de humilde origen, no sólo demostró ser valiente y estar comprometido con la causa republicana, por la cual luchó con arrojo, comandó tropas exitosamente, y luego de la Independencia, supo mantenerse en su parcela del poder en la presidencia de Venezuela. Ya distanciado de la política, se dedicó a la lectura, y llegó a disfrutar del Teatro y la Ópera. Merece con creces nuestra reivindicación, aunque muy tardía.
Los que sí se han ganado ese puesto de torpes y brutos son los de la Troika criolla, Maduro, Diosdado y Arreaza (Nico y el yerno oportunista se colearon en esta mojiganga mucho después de que ya habían filmado los primeros capítulos del 4F y Yare, Cabello medio participó en esa chimbonada, y ya daba señas de que en materia militar no puede diferenciar un arma de fuego de un arma de aire comprimido, pero distingue un billete de 100 dólares a dos cuadras de distancia), los tres compiten entre sí a ver quien demuestra ser más patán, más improvisador, más energúmeno, más bestia a escala nacional e internacional, galardón que ganó por muchos años consecutivos el finado Charlatán Eterno, que revolotea en su nueva configuración como avechucho entrometido, pero como que no domina ni siquiera el lenguaje de señas, contimás el de los silbiditos y Twits, propios de su especie.