La esperanza
La esperanza es indispensable para seguir viviendo. Cuando flaquees es útil leer a Victor Frankl, el gran psiquiatra judío austríaco, creador del método de la logoterapia quien logró sobrevivir, en las peores condiciones imaginables, al campo de concentración nazi de Auschwitz.
Su libro «El hombre en busca de sentido»continúa siendo de los más vendidos, y su tesis es que la vida nunca se torna insoportable, solo por la falta de significado y propósito y, las decisiones y no las condiciones, determinan quiénes somos.
Por eso es que cuando escuchamos a algunos argumentar que la situación económica está mejorando, a pesar de que sabemos que eso es un espejismo creado en gran parte por la sobrevaluación del Bolívar, no debemos fundamentar nuestra esperanza en esa falaz circunstancia, sino recordar lo que sostiene Frankl, que el éxito, como la felicidad, es solo el efecto secundario de la dedicación personal a una causa mayor a uno mismo.
Por ello nuestra esperanza debe estar cimentada en el sueño de que si seguimos luchando unidos, si podremos superar la oprobiosa condición de vida que nos ha impuesto durante más de 20 años está grotesca dictadura.