El reto de los Brics
Se realiza en Jhonannesburgo, Sudáfrica, la cumbre de los Brics, una agrupación con intereses económicos que integra, aparte del país anfitrión, a Brasil, China, India y Rusia.
El encuentro se realiza en un momento interesante para la geopolítica mundial, por lo que ha significado la invasión rusa a Ucrania, la importancia cada vez mayor que está jugando ese país en África, la alianza entre Moscú y Pekín, la creciente tensión sobre el tema taiwanés, los lazos estrechos del actual Gobierno de EEUU con Europa, cimentados en la amenaza rusa y tras superarse el deslinde al que Donald Trump pretendía, mientras Biden cierra además filas con Japón, Corea del Sur, Arabia Saudita e Israel, como contrapesos regionales en Asia.
La potencia económica de los Brics es nada deleznable. Estos países representan el 42% de la población mundial, el 30% del territorio del planeta y el 23% del producto interno bruto. Aunque no han podido desarrollar una acción contundente conjunta, desde ya hay coincidencias en temas como minimizar el uso del dólar como moneda de intercambio comercial, incluso se habla de crear un signo monetario del bloque, tal y como la tiene a Unión Europea. También se ha planteado la posibilidad de incorporación al grupo de otros países interesados, entre los que se encuentra Venezuela.
La concreción de esta alianza significa un gran reto para occidente, en una competencia que incluye no solo mercados, sino la hegemonía política. La constitución de estos dos grandes super bloques, con profundas diferencias en distintos ámbitos, avizoran los momentos complicados que pueden venir en el corto plazo.