El camaleón
El camaleón es un pequeño reptil famoso por su habilidad de cambiar de color según las circunstancias y por su lengua rápida y alargada. Es de usanza en Occidente utilizar el término como sinónimo de persona voluble que adapta su comportamiento a las circunstancias
En Venezuela, en estos últimos doce años, hemos constatado la particular habilidad del Presidente de mimetizarse según las circunstancias. No podemos olvidar el espíritu de redención a su regreso de La Orchila en el que con crucifijo en mano prometió cambiar. Tampoco debemos dejar de recordar cuando en vísperas de pasadas elecciones era todo amor y paz. Ahora presenta un nuevo rostro: elimina de su vocabulario la palabra muerte y usa ropa multicolor, hasta le pone límites al uso de la palabra socialista. ¿Quién ha visto que las areperas son socialistas dixit el Chávez de hoy?.
No hay que olvidar que el comportamiento típico del camaleón es mimetizarse para no ser sorprendido por sus enemigos y para confundir a sus presas.
¡Allá quién se compre este cambio! Por eso el dicho popular sostiene que el hábito no hace al monje. Chávez es Chávez y no su vestido. Es un político astuto y su especialidad es la de confundir y engañar a sus adversarios. No caigamos en la trampa de su hablar melifluo y de su atuendo en el que suprime, por ahora, el verde militar y el rojo de la sangre. Ahora más que nunca hay que evaluarlo por lo que hace y por lo que deje de hacer y no perder el rumbo por estar pendiente de lo que pueda o no significar su situación personal; la meta sigue siendo la de seleccionar al mejor capitán que sepa y pueda llevar a la nación a buen puerto.