El Editorial
Discursos vanos
Una de las peores características de estos últimos años ha sido las peroratas continuas y vacuas de los que han asumido la conducción, a través de estos años, de la destrucción de nuestro país.
La retórica trasnochada de un modelo político desfasado basado en una ideología caduca e inoperante a nivel mundial, ha generado la peor crisis ocurrida en Venezuela desde su fundación como República independiente.
Los síntomas de estos desaciertos son conocidos de todos, la mayor hiperinflación del planeta, la más acelerada y continua caída del Producto Interno Bruto, la dramática y forzada emigración de más de 10% de la población del país, el empobrecimiento total de prácticamente la inmensa mayoría de los venezolanos, salvo, claro está, los integrantes de la nueva clase revolucionaria, etc.
Para no continuar con esta letanía no vamos a comentar y mucho menos analizar la última intervención de Maduro ante ese ilegítimo engendro suyo que es la ANC. Lo único que podemos decir es que todos los cuentos allí pronunciados solo sirven para empeorar, aún más la crisis que está hundiendo a Venezuela.
La única solución viable es que la legítima Asamblea Nacional continúe con su hoja de ruta. Termine por aprobar su estatuto de la transición y fije el camino para lograr, lo más pronto posible, la salida democrática y pacífica a esta incoherente circunstancia.