Torino Economics: ¿Venezuela podría regresar al mercado petrolero de EE.UU.?
Chevron Corp, el último productor de petróleo estadounidense que sigue operando en Venezuela, podría ser el primer beneficiario si se llega a un acuerdo con la administración de Maduro
El conflicto bélico entre Rusia y Ucrania ha brindado un contexto ideal para que los gobiernos de Joe Biden y Nicolás Maduro se aproximen con el fin de debilitar la alianza estratégica entre Venezuela y Rusia, procurando a su vez el retorno del suministro de crudo venezolano a Estados Unidos y la normalización política en Venezuela, que tendría como primer paso la celebración de elecciones libres.
Sobre este tema, Torino Economics, unidad de investigación de la consultora financiera Torino Capital, sostiene en su más reciente informe sobre Venezuela que la delegación de EE.UU., que habría estado encabezada por Juan González, Director Principal para el Hemisferio Occidental, acompañado de Roger Carstens, enviado presidencial especial para asuntos de rehenes y Jimmy Story, embajador de Estados Unidos en Venezuela; en conjunto con la delegación venezolana, liderada por el propio Nicolás Maduro junto a la vicepresidenta Delcy Rodriguez, habría tenido como foco principal la “agenda energética” entre ambos países.
No obstante, el trasfondo de la guerra entre Rusia y Ucrania implicaría una oportunidad ideal para la administración Biden de evaluar, adicionalmente, las posibilidades sobre la reanudación de suministro de crudo venezolano al mercado estadounidense, con el propósito de encontrar alternativas ante la prohibición de las importaciones de petróleo ruso.
Asimismo, la presencia de Carsterns en la delegación norteamericana ya apuntaba al objetivo de gestionar la liberación de ciudadanos estadounidenses detenidos en Venezuela, añade Torino Economics en su informe.
Energía: ¿Venezuela regresa al juego?
La “agenda energética” que habría sido abordada por ambas delegaciones, podría implicar que Venezuela, a través de un eventual alivio de las sanciones, retomaría potencialmente las cuotas de mercado del petróleo venezolano en EE.UU., particularmente en la Costa Este, región en la cual históricamente el país se había constituído como un proveedor seguro.
De concretarse esta posibilidad, Torino Economics considera que las perspectivas de crecimiento económico del país sudamericano podrían mejorar significativamente. No obstante, posicionar el crudo venezolano de vuelta en el mercado norteamericano podría ocurrir, probablemente, hacia finales de 2022.
Aprovechar esta ventana de oportunidad implicará que la Administración de Maduro genere las condiciones necesarias para reactivar la capacidad de su producción petrolera, que actualmente promedia 700.000 b/d.
Si se mantienen las condiciones actuales, es decir, sin mayores cambios normativos que fomenten la participación del sector privado en la industria y sin alivio de sanciones por parte de EE.UU., la producción petrolera podría alcanzar, de acuerdo con las estimaciones de la unidad de investigación de Torino Capital, aproximadamente 1,1 millones de b/d al término del presente año.
Un incremento adicional de la producción de crudo venezolano, que le permita al país posicionarse nuevamente como proveedor de crudo al mercado norteamericano, deberá pasar no solo por el potencial alivio de las sanciones impuestas por EE.UU. a las importaciones de crudo desde Venezuela, sino también por la reforma de la actual Ley Orgánica de Hidrocarburos que rige al sector petrolero.
Dicha reforma debería apuntar a ampliar la participación del sector privado a través de un regimen impositivo atractivo que permita potenciar de forma significativa las inversiones en el sector.
Es importante destacar que durante los doce meses previos a las sanciones, Venezuela llegó a exportar, en promedio, cerca de 500.000 b/d a las refinerías de crudo pesado de la Costa Este de EE.UU., por lo cual esa cuota de mercado representaría un primer potencial de suministro que el país sudamericano podría generar.
Sumado a esto, es oportuno destacar que, desde que Venezuela acusó el impacto de la prohibición de sus exportaciones de crudo venezolano a EE.UU., se pudo observar que el petróleo ruso comenzó a posicionarse como proveedor alternativo, llegando a exportar hacia las refinarías de la Costa Este, cerca de 600.000 b/d, entre barrilles petroleros y derivados.
Si bien retomar una cuota de mercado de aproximadamente 500.000 b/d podría representar una meta cuesta arriba para la industria petrolera venezolana, existen algunas consideraciones que podrían alentar, sobre todo en el mediano y largo plazo, el logro de esta meta.
Sin embargo, este escenario tendría lugar asumiendo que las negociaciones continúen y se concreten en la habilitación de licencias que permitan el retorno del crudo venezolano al mercado norteamericano.
El factor Chevron
Chevron Corp, el último productor de petróleo estadounidense que sigue operando en Venezuela, podría ser el primer beneficiario si se llega a un acuerdo con la administración de Maduro. A Chevron se le ha prohibido el envío de crudo venezolano, desde 2020.
Si en definitiva tiene lugar una relajación de las sanciones, la compañia petrolera norteamericana estaría en posición de recuperar parcialmente la producción en Venezuela y reanudar las exportaciones a su propia refinería y a otras en la Costa Este de EE.UU., en sustitución del crudo ruso.
En tal sentido, el presidente de la Cámara Petrolera de Venezuela, Reinaldo Quintero, afirmó que Chevron podría aportar cerca de 400.000 b/d “a la necesidad de crudo que tiene la zona de la costa del golfo de México en EE.UU., incluidas las refinerías de Citgo, que son un activo de PDVSA y que consumían crudo venezolano”.
Antes de las sanciones, las estadounidenses Valero Energy, Citgo Petroleum, Chevron y PBF Energy se encontraban entre los principales compradores estadounidenses de petróleo venezolano en EE.UU, sostiene Torino Economics.
Canadá y Colombia reaccionan
Luego de que las las conversaciones entre la administraciones de Biden y Maduro trascendieron publicamente, algunas reacciones de potenciales competidores del crudo venezolano en el mercado de EE.UU.
La ministra de Energía de Alberta (Canadá), Sonya Savage, declaró que “nosotros somos la solución, no Venezuela y otros”.
Savage agregó que Alberta tiene capacidad de sobra en oleoductos y ferrocarriles y puede transportar más petróleo a Estados Unidos.
Por su parte, el presidente de Colombia, Ivan Duque, ofreció crudo colombiano a su homólogo norteamericano, Joe Biden en su reciente visita a Washington.
Al respecto, Duque indicó que “Colombia hoy es un país que tiene más capacidad de suministrar hidrocarburos de lo que tiene Venezuela”.
Asimismo, el mandatario colombiano anadió que su país produce actualmente mas de 890.000 b/d, y que en la actualidad su producciòn de hidrocarburos representa el 3% de las importaciones de EE.UU.
Partiendo de lo anterior, Torino Economics estima que Colombia no podría constituirse como una alternativa sostenible para el mercado norteamericano y, en particular, para la Costa Este de EE.UU., donde Venezuela tiene un mercado natural. En tal sentido, según la Cámara Colombiana de Bienes y Servicios de Petróleo, Gas y Energía, con el nivel de reservas actuales, Colombia debería importar crudo a partir de 2026. Por su parte, el crudo proveniente de Alberta tendría mayor posibilidades de competir como alternativa de suministro de crudo ruso al mercado norteamericano, ante la infraestructura petrolera a disposición.
Enfoque de Torino Economics:
Si bien habría un potencial de recuperación de la producción petrolera venezolana, que permita que las exportaciones de crudo hacia EE.UU. y en especial hacía las refinerías de crudo pesado de la Costa Este puedan recuperarse al menos parcialmente; Torino Economics considera que esto último dependerá no solo del nivel de flexibilixación de las sanciones norteamericanas al crudo venezolano. Adicionalmente, la administración Maduro debe promover las reformas de ley necesarias que propicien, a través de un marco fiscal competitivo, la participación del sector privado en la industria petrolera, con el fin de aumentar la producción para suplir la cuota de mercado norteamericano que históricamente ha cubierto.
No obstante, si bien la vuelta de las exportaciones de crudo venezolano no se traducirían en un impacto significativo para el mercado norteamericano en el corto plazo, esta “agenda energética” podría ser la punta de lanza para introducir en las conversaciones con el Gobierno de Maduro, temas mas complejos desde el punto de vista politico como la normalización de la vida democrática del país a través de la realización de elecciones libres y la liberación de ciudadanos norteamericanos detenidos en Venezuela.
En todo caso, la consultora financiera internacional considera que la Administración de Maduro, de comprometerse a continuar las conversaciones de alto nivel con EE.UU., podría tener a la mano una ventana de oportunidad que le permita al crudo venezolano regresar al mercado norteamericano, lo que supondría menores precios de descuento y con ello un incremento significativo del ingreso petrolero, en un contexto de elevados precios del crudo como consecuencia de las tensiones geopolíticas generadas por el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania.