Rompecabezas y misterios: ¿Dónde están los dólares?
La acelerada recuperación petrolera que señala el gobierno no parece compaginar con el nivel de “reservas internacionales”. Tampoco sería consistente con la política económica, especialmente la cambiaria. Explicar el estancamiento de las reservas es algo así como un rompecabezas.
La semana pasada el Presidente ubicó la producción petrolera en 2,95 millones de barriles diarios y días después el presidente de PDVSA indicó que había sobrepasado los 3,0 millones. La cuota de Venezuela en la OPEP es de 2,85 millones de barriles diarios, sin incluir los petróleos extra pesados de la faja. Una producción global de más de 3 millones es análoga a la de 2002 antes del paro. En consonancia y de acuerdo a los anuncios oficiales, las exportaciones de febrero deberían haber superado con facilidad los 1,3 millones de barriles diarios, y las de enero deberían ser superiores a 650 millones. Con un precio de la cesta menor de 30 dólares el barril en enero y superior en febrero (información oficial), las exportaciones de estos dos meses deberían sobrepasar los 1.700 millones de dólares.
Desde la imposición del control cambiario hasta el 16 de marzo, el stock de reservas internacionales del BCV y de los activos externos en el FIEM sólo aumentó en 104 millones de dólares. El BCV no vendió divisas en ese lapso y de acuerdo al Convenio Cambiario PDVSA debe vender al BCV los dólares que obtiene por las exportaciones petroleras. Un miembro del Directorio del BCV indicó la semana pasada que hasta ese momento PDVSA no había vendido divisas al BCV, y manifestó que ello era un misterio para la autoridad monetaria.
Una pregunta es obvia, ¿donde están los dólares de la exportación petrolera? Aun tomando en cuenta factores como los rezagos en el cobro de las facturas, las importaciones de gasolina, etc.; resulta un rompecabezas explicar el estancamiento de anteriormente señalado.
Además habría que suponer que el control cambiario será rápidamente desmontado, ya que en habría desaparecido la causa que se esgrimió para su imposición. El control cambiario sería inconsistente con una recuperación petrolera tan acelerada, y menos tan rígido como el actual. Hasta ahora no ha sido de restricción en los flujos de oferta de divisas, simplemente los ha prohibido.
¿Qué es lo que sucede? ¿Sería posible algo de transparencia?