Sector venezolano de criptomoneda se encuentra en estado vegetativo
Unas 75.000 unidades de equipos de minería de criptomonedas fueron desconectados en el país. Actores del sector se quejan de que están «pagando justos por pecadores»
Venezuela, en su intento por esquivar las sanciones impuestas por Estados Unidos, apostó por las criptomonedas.
Durante la presentación de la “Ley Antibloqueo”, Nicolás Maduro mostró su disposición a utilizar «todas las criptomonedas del mundo a fin de mejorar, de una vez por todas, la economía del país”.
También anunció «importantes proyectos relacionados con las criptomonedas» para ayudar a eludir dichas sanciones. Entre sus apuestas destacó la creación de su propio token, el Petro, así como una ley para promover su uso.
La Superintendencia Nacional de Criptoactivos (Sunacrip), que es, por ahora, el principal regulador del mercado de criptomonedas en Venezuela es objeto de una investigación por la malversación de miles de millones de dólares procedentes de la venta de petróleo de PDVSA, cuyo destino eran las billeteras de criptomonedas de la entidad y cuyo objetivo era eludir las sanciones de Estados Unidos.
Criptomonedas en estado vegetativo
En primer lugar, el país lleva tres meses consecutivos sometido a severas restricciones en materia de criptomonedas, incluida la prohibición total de la minería, según gran-imator.co.
Segundo: más de 75.000 personas se ganaban la vida en el país con la minería de criptomonedas y ahora todas ellas se han visto obligadas a interrumpir sus operaciones.
Independientemente de ello, antes de que estallara el caso de corrupción, el Petro ya atravesaba un mal momento, pues había perdido un 45% de su valor. Actualmente, según el Banco Central de Venezuela (BCV), su precio de referencia se mantiene en 60 dólares.
La prohibición del Estado venezolano de minar criptomonedas ya tiene cerca de 3 meses, por lo que muchos mineros con problemas de liquidez podrían cerrar.
Grupos mineros venezolanos estimaron que alrededor de 75.000 unidades de equipos fueron desconectados.
Con información de bancaynegocios.com