Renta petrolera y justicia social
En otros tiempos hemos plantedado la conveniencia de usar la repartición de la renta petrolera como criterio para evaluar la justicia de la distribución del ingreso entre los diferentes actores participantes (1), y sus futuras tendencias.
Este tema formó parte de nuestra propuesta en la tesis doctoral, que presenté ante la Sorbona (Paris I) en octubre de 1973, eran los tiempos de las revoluciones impositivas de los países productores. El trabajo reciente de Henry Delgado en PW nos da pié para refrescar estos conceptos.
Recordemos de microeconomía que la distribución de los ingresos normalmente se comparte (v. Fig.1) entre tres: las empresas (según los precios), los consumidores (disfrutan del excedente) y los no consumidores, que no disfrutan nada porque no tienen la capacidad adquisitiva para comprar, lo que Dupuit llamó “la utilidad perdida”. De toda la utilidad de un proyecto, mientras más toman las empresas menos dejan a los consumidores, depende de la situación del mercado y las regulaciones. Ha habido empresas monopolísticas abusivas, así como empresas que subsidian o regalan los servicios y finalmente quiebran.
Nuestra posición ha sido (Fig.2 ) una justa repartición entre todos, incluyendo los no consumidores. Los marxistas se inclinan por los trabajadores solamente, una visión sesgada.
De su parte, lo que va a las empresas lleva la participación de los impuestos (gobiernos), a los dueños del capital y a los trabajadores, donde ocurre igualmente una importante pugna histórica (Fig. 3). Con el compañero Marx y sus recientes y solitarios seguidores.
Dentro de este contexto, que hemos tratado ampliamente en varios artículos (nota 1), es apreciada la contribución del Econ. Delgado, quien plantea una repartición entre los inversionistas (empresas públicas y privadas), el Estado y la “Población” (aparentemente solo por vía de los trabajadores de las empresas).
Siendo así deja afuera una parte destacada de los beneficiarios (los consumidores y los no consumidores), quienes soportan los impuestos al consumo, muy destacados en los grandes países consumidores, como se sabe, y que entran con todo derecho en la repartición del valor de una explotación.
Así que bienvenido este analista, comenzó muy bien encaminado, solo tiene que ir corrigiendo y ampliando sus investigaciones, buen enfoque, el propio. La repartición de la renta es una buena herramienta para entender el pasado e incluso para analizar las tendencias del futuro (ver figuras anexas), porque no parece posible seguir cargando a los consumidores (vista su disposición a pagar) los nuevos aumentos de los costos petroleros, ahora le toca a las multinacionales (nota2, y Fig. 4).
Lo hemos anotado en anteriores posiciones:
LA HISTORIA NO DEBERIA ENTENDERSE COMO RESULTADO DE UNA LUCHA DE CLASES. LA LUCHA DE CLASES, LAS “REVOLUCIONES” SON SOLO UN CASO PARTICULAR DE LAS LUCHAS ENTRE GRUPOS DE INTERESES, OCASIONALMENTE POBRES CONTRA RICOS, PERO MAYORMENTE LUCHAS ENTRE RICOS, PAPAS CONTRA EMPERADORES, VIKINGOS CONTRA NORMANDOS, PROVINCIAS CHINAS CONTRA OTRAS PROVINCIAS CHINAS. GENERALES CONTRA OTROS GENERALES EN VENEZUELA.
GRUPOS LIDERIZADOS POR PERSONAJES MESIANICOS PARA SALVAR AL MUNDO, APOYADOS, ESO SI, POR EJERCITOS CONSTITUIDOS POR POBRES. UNA GESTA DE CARÁCTER DARWINISTA MAS QUE MARXISTA.
Notas
(1)- Véase de AMA “El reparto de la renta petrolera”. Analitica.com y El Independent.org., junio 2008. V. t. “Sobre el socialismo petrolero de LC Palacios”, ´ analitica.com, febrero 2008; v.t. “Cantórbery Cuevas y la egocracia” analitica.com enero 2007. Igualmente Marx revisitado, Socialismo XXI, &&.
(2) – En nuestra tesis doctoral (octubre 1973), colección Esrtdios Económicos No. 2, BCV, propusimos un incremento de los impuestos petroleros nacionales, para tomar provecho de la renta todavía disponible en el excedente del consumidor, lo que fue aprovechado primero por las alzas de impuestos en los derivados de los combustibles que aconteció por la época. Khadafi fue el único que la leyó, aparentemente.
(%=Image(7423496,»C»)%)
(%=Image(3850311,»C»)%)
(%=Image(2343595,»C»)%)
[Nota: la plusvalía marxista solo se aplica en las empresas privadas, en las estatales la explotación del trabajador (tipo médicos y deportistas cubanos en Venezuela) “no existe” – y tampoco la “plusvalía al revés” – cuando los trabajadores explotan al capital de las empresas públicas deficitarias]
(%=Image(9326505,»C»)%)
(%=Image(4024052,»C»)%)