Renovar el parque automotor, otro desafío en la lista para Venezuela
Viajar al pasado es posible en Venezuela, donde el parque automotor acumula un promedio de 22 años de antigüedad
El parque automotor venezolano tiene una antigüedad de, al menos, 22 años, con automóviles obsoletos, según estimaciones de la Cámara de Fabricantes de Autopartes (Favenpa), se requiere al menos unos siete años de incorporación constante de unidades nuevas para comenzar la renovación, algo que sólo podrá hacerse a largo plazo.
En declaraciones a Banca y Negocios, Omar Bautista, presidente de Favenpa, estimó que en ese lapso de tiempo se deberían incorporar unas 100 mil unidades por un año, para un estimado de 700 mil automóviles. Una tarea que será complicada ya que no hay condiciones estructurales para ello.
Viajar al pasado es posible en Venezuela, donde el parque automotor acumula un promedio de 22 años de antigüedad, según el sector, que atribuye este envejecimiento a la caída del poder adquisitivo y a la falta de financiación bancaria para la compra de nuevos vehículos
Bautista precisó que, entre las condiciones estructurales para esto, además de mejorar el poder adquisitivo del venezolano, se requieren de planes de financiamiento más atractivos para fomentar la adquisición de carros nuevos.
La Cámara Venezolana de la Industria Automotriz (Cavenez) apunta que solo en febrero de este año se logró la producción de cuatro automóviles y que en entre enero y noviembre de 2023, la fabricación nacional fue solo de 57 vehículos. Estas cifras contrastan con los picos más altos de la producción en el país. “En el año 1978 se produjeron 182.678 vehículos. En el año 2007, se produjeron 172.418 vehículos y se vendieron 491.899 vehículos”, destacó el gremio.
Mantener un parque automotor envejecido representa riesgos, tanto ambientales como para los usuarios del transporte, y el 80% del parque automotor en Venezuela tiene más de dos décadas de antigüedad.
En el marco legal, la Ley de Tránsito Terrestre advierte que los propietarios de automóviles tienen una serie de obligaciones: “mantener el vehículo en perfectas condiciones de seguridad, funcionamiento e higiene”, así como también están obligados a “someter el vehículo a revisión” de forma periódica.
Bautista explicó que los consumidores que, pese a la crisis, “tienen cierto poder adquisitivo, y las empresas que compran vehículos para sus ejecutivos están comenzando a cambiar” los automóviles, lo que ha incrementado las ventas, que espera continúe en 2024, aunque sin “recuperar la cantidad anterior” porque “no hay política de financiamiento bancario” para esto.
En este sentido, señaló que entre el 70 y el 80 % de las ventas de vehículos eran a través de financiamiento, pero ahora “eso no existe”.
Una empresa japonesa presentó la semana pasada un nuevo modelo año 2024, con un precio de 35.000 dólares, un monto al que no tiene acceso la mayoría del país, y que supera en casi 10.000 dólares el precio del vehículo en Europa.
Según la firma Ecoanalítica, solo el 15 % de los venezolanos gana más de 300 dólares al mes.