Oliveros asegura que la vida útil de los nuevos billetes serán unos seis meses
El Banco Central de Venezuela anunció hace tres semanas que tres nuevos billetes pasarían a formar parte del cono monetario venezolano. Estos, de 200 mil, 500 mil y un millón, entrarían en circulación a partir del lunes 8 de marzo y, desde entonces, han llegado tímidamente a los cajeros automáticos y a las manos de los venezolanos.
Los tres billetes nacieron devaluados. El menor de éstos, si acaso alcanza para costear un pasaje del transporte público y eso dependiendo de la ruta. Mientras que con el de mayor denominación, podría alcanzar para un pan o alguna golosina pequeña, porque para poder adquirir algún producto de la cesta básica, se necesitarían más billetes. Por ejemplo, para comprar un kilo de harina de maíz precocida, se necesitan dos billetes de un millón de bolívares.
Para el economista y director de la firma Ecoanalítica, Asdrúbal Oliveros, la vida “útil” del billete dependerá única y exclusivamente del comportamiento de la inflación, «la cual se estima que cierre este 2021 en el orden de 1.200 y 1.500%», expresó.
Para Oliveros la vida útil de estos nuevos billetes podría ser máximo unos seis meses «e incluso implicaría tener que usar una cantidad importante de billetes para pagar simplemente el pasaje (del autobús)», calculó.
Son por tanto unos 180 días antes de que la inflación y la devaluación hagan de nuevo inservible el flamante billete y quede, de nuevo, postergado su uso en favor del dólar, la moneda en la que hoy se hacen la mayoría de las transacciones en Venezuela.
«Sin embargo, creo que (esta nueva emisión) es un paso intermedio que el Gobierno de Maduro está haciendo antes de ir hacia un proceso de reconversión monetaria, esto es, eliminarle nuevamente ceros a nuestra moneda para que pueda facilitarse las transacciones», destaca Oliveros, quien cree que pueden quitar cinco o seis ceros más en ese proceso.
A su juicio, el nuevo plan puede llevar a crear una economía «enteramente digital», en la que «el Gobierno cada vez va a emitir menos cantidad de billetes».
Al menos el billete de un millón, que llega acompañado de dos hermanos menores y olvidados antes de nacer, los de 200.000 y 500.000, «le dan una prórroga corta al bolívar soberano» antes de que sea también enterrado.