La popularidad del servicio eléctrico
La semana pasada, nuevamente, nuestro servicio eléctrico volvió a acaparar titulares en todos los medios. No hay evidencia más notable de que el sector anda mal que su popularidad mediática. Las actividades de servicios deben ser silenciosas y con un perfil muy bajo, sólo entonces andan bien. Nadie celebra cuando toca el interruptor y la luz enciende, pero maldice a la compañía cuando se va la corriente. Es igual que un árbitro, que cuando pita bien es cuando nadie se acuerda de él. Por eso ahora que los periodistas, y el público en general, comienzan a discutir sobre megavatios y subestaciones, se evidencia que el sector está funcionando muy mal.
La popularidad en esta ocasión ha recaído en Planta Centro Y OAM. La primera es notoria desde hace tiempo, pero en esta ocasión llenó la primera página de Notitarde con la noticia de que todas sus unidades estaban fuera de servicio. Para la gente del sector eléctrico el hecho no es nada inusual y se produce varias veces todos los años. De sus 5 unidades hay dos que tienen años fuera de servicio, mientras las otras tres que quedan (las Nº 2,3 y 4) están llenas de problemas. Para empezar, cuando funcionan, dan la mitad de su capacidad nominal, en vez de 400 MW que es lo que dice la placa de cada unidad, su producción está alrededor de 200 MW. Pero además, lo usual es que alguna esté parada. En junio tuvo dos unidades en servicio, la 2 y la 3, ambas generando menos de 200 MW, pero el día 21 salió la 2, de modo que la central se quedó con una sola máquina, la Nº3. Así operó casi por un mes, hasta el sábado 19 de julio cuando salió esta última unidad y la central se quedó en cero. Hasta la fecha (martes 29 de julio) sigue así. De modo que la central termoeléctrica más grande de Suramérica, con una capacidad de 2.000 MW, no ha podido llegar a 400 ni un solo día en los últimos dos meses.
Lo de Planta Centro es un caso perdido, a pesar de contar con excelentes profesionales, a los que han condenado a trabajar con las uñas durante años por los crónicos problemas financieros y la volatilidad de la gerencia de Cadafe. Por eso he propuesto, desde esta tribuna, que en vez de seguir con el proyecto de conversión a gas de las 4 unidades que queman fuel oil (Las Nos 1, 3, 4 y 5) se instalen en los terrenos de la planta tres centrales de ciclo combinado, para llegar a 1.500 MW. Esto permitiría aprovechar toda la infraestructura existente, gasoducto, líneas de transmisión, etc. Es la vía más expedita que tienen nuestras autoridades para aliviar la crisis del sector en un plazo razonable, mientras se prepara un plan de mediano y largo plazo.
Pero la otra planta que se hizo popular la semana pasada sí es un caso raro. Se trata de la central Oscar Augusto Machado (OAM) de la Electricidad de Caracas ¿Quién carrizo fuera del sector sabe que existe esta central? Algún periodista confundido la ubicó en Los Teques, cuando está en el Km 8 de la Panamericana. Un error perfectamente comprensible. La central OAM pasó totalmente desapercibida durante el tiempo que perteneció al sector privado, lo que evidencia lo bien que ha funcionado. Ha sido tan ignorada que nuestros patriotas revolucionarios ni siquiera le han cambiado el nombre y todavía hace honor a un importante gerente del sector como fue el Ing. Machado. Gana la popularidad actual por una corta salida de servicio debida a un incidente en las líneas de transmisión en Santa Teresa. Las fallas siempre pueden ocurrir y ocurren en todos los equipos electromecánicos, por ello no debemos alarmarnos por una salida eventual. Confiemos en que este caso haya sido sólo un hecho aislado y OAM siga manteniendo en manos del gobierno revolucionario la confiabilidad que siempre la ha caracterizado. Ojalá que pronto nos olvidemos de ella y no vuelva a disfrutar de ningún momento de popularidad.