Importación de calzado domina el mercado frente a caída de producción nacional
La industria de calzado venezolano trabaja actualmente entre 10% y 15% de su capacidad instalada, lo que ha incrementado la importación de zapatos y conduce a que los costos de la producción nacional sean más elevados, aseguró el presidente de la Cámara Venezolana del Calzado y Componentes (Cavecal), Luigi Pisella.
El consumo per cápita de un país que no atraviese una crisis económica oscila entre dos y 14 pares por habitante al año. Sin embargo, se encuentra en 0.5, que corresponde a la cantidad mínima.
“Esta situación genera que nuestros costos sean más elevados, adicional a los problemas de electricidad y la reducción de la jornada laboral que hemos tenido”, agregó Pisella.
Durante una entrevista en Unión Radio, Pisella aclaró que desde el año 2013 el gremio se ha visto afectado y durante el año 2019 se ha producido 40% menos.
Pisella aclaró que la Cámara no rechaza la importación debido a que es “sana” porque ofrece un comparador de precio y calidad, sin embargo, en el caso de Venezuela, no es beneficiosa pues debe hacerse solo en contextos de normalidad del mercado.
Asimismo, resaltó que el sector se encuentra en desventaja ante el cobro elevado de impuestos. “No estamos en contra de que se trate de equilibrar los ingresos a escala nacional y mediante las alcaldías, pero tampoco se le pueden achacar todos los males a los productores de calzado”.
Años atrás, el calzado estaba subsidiado con dólares preferenciales y era más asequible para los ciudadanos comprar zapatos. Ante la caída de esta modalidad, el pico de consumo llegó a tres pares por habitante al año y bajó hasta su último nivel.
