Freites: En la nómina de PDVSA hay 31.500 personas que cobran y no trabajan
La principal empresa de petróleo venezolana, PDVSA, tiene una nómina fantasma de personas que cobran sueldos y salarios, pero que no trabajan, ademas de una disminución de su fuerza laboral generada por la corrupción, mala gerencia y deficiencia en los procesos que se traduce en la renuncia de sus ingenieros y operadores.
Ivan Frites, secretario general del sindicato de trabajadores petroleros del estado Falcón, explicó desde la ciudad de Maracay en la presentación del proyecto Venezuela Energética que «en agosto de 2016 PDVSA tenía 143 mil trabajadores, de los cuales hay una nómina parásita de 31500 personas que cobran y no son trabajadores petroleros. Lo que quiere decir que qedan 111 mil trabajadores que desde el 2014 han ido renunciando».
Detalló que en Amuay había 58 ingenieros de procesos y para el viernes pasado quedaban 12. La misma situación ocurre en la refinería El Palito que contaba con 37 ingenieros de procesos y hoy quedan nueve. «PDVSA es una industria que no tiene operadores de planta que son los que manejan los procesos. En noviembre empezaron 126 y ahora quedan solamente 22. Estos trabajadores no se pueden sustituir de un día para otro porque se necesitan al menos 10 años para que un trabajador pueda ser integral», agregó.
Por su parte, el dirigente de Voluntad Popular, Yon Goiochechea, aseguró que el libro escrito por Leopoldo Lopez y Gustavo Baquero es una propuesta para la Venezuela que quieren y aspiran los venezolanos. «Siempre se ha dicho que se necesita valentía para sacar al país adelante, pero nadie encuentra la valentía si primero no encuentra la esperanza y este libro es acerca de la esperanza porque nos dice qué va a venir cuando en Venezuela haya un sistema que permita que se explote la creatividad, la bondad y los recursos que tenemos».
El dirigente de la tolda naranja aseguró que Venezuela Energética propone una reforma no sólo del sector petrolero sino del sector eléctrico y fuentes renovables que se necesita como palanca para el desarrollo. Además destacó que «necesitamos un marco jurídico estable, independendiente de los poderes públicos y la modificación de la Ley Orgánica de Hidrocarburos para sacarnos de encima la camisa de fuerza que son las empresas mixtas».
Detalló que en la actualidad si una empresa internacional quiere invertir 10 mil millones de dólares en la Faja del Orinoco tiene que hacerlo en sociedad y en minoría con PDVSA que es una empresa sancionada internamente y quebrada. «Tenemos que crear un marco fiscal flexible para que las empresas vean atractivo venir a Venezuela incluso si los precios bajan. Nadie invierte 10 o 15 mil millones de dólares para ponerlo bajo jurisdicción de tribunales locales que los pueden expropiar en cualquier momento».
Durante la presentación del libro Venezuela Energética también participó el diputado de la Asamblea Nacional por el estado Aragua y coordinador regional de Voluntad Popular, Guillermo Cruces, quien sostuvo que «este proyecto viene en medio de una de las crisis más graves que ha vivido el país y nos da una lección de cómo vamos a recuperar a nuestro país. A través de esta herramienta podemos salir a convencer a los venezolanos de que sí hay una forma para recuperar al país».