El Culto a la personalidad
Nos cuenta Alicia Estaba, en su columna del domingo en Correo del Caroní, que en Edelca han colocado como imagen de fondo de la pantalla de todas las computadoras de la empresa la foto de nuestro Máximo Líder, de tal forma que nadie la puede cambiar y todos se la tienen que calar. La foto en cuestión presenta al Ungido con la típica camisa roja, que es la que se pone cuando visita industrias, y una foto de Caruachi detrás. La idea es correcta ya que Caruachi es la gran obra hidroeléctrica de la revolución, aunque su inicio, financiamiento y arranque de los principales contratos hayan sido heredados de la administración anterior. Sería impensable que pusieran una foto de Guri, la central madre, porque nuestro Presidente nunca se ha dignado en visitar esta represa. Debe ser porque desde Guri es difícil afirmar que la IV República no hizo nada en 40 años, pero lo cierto es que nunca ha entrado a conocer la casa de máquinas de la central, a pesar de lo que le gustan las instalaciones de Edelca y en especial el campamento de Macagua, donde incluso le celebró un cumpleaños al “padre” Fidel.
En la foto nuestro Guía mira y señala con el dedo levantado al trabajador que se sienta frente a la computadora y lo educa, utilizando una sabia sentencia entrecomillada, que reza: “El recurso financiero es necesario pero no suficiente, se requiere liderazgo y seguimiento riguroso de los planes, un actuar distinto” ¡Oh cuanta sabiduría! Pienso que podía haber prescindido de la referencia al recurso financiero, porque al paso que vamos la empresa va a tener que aprender a vivir sin dinero. De hecho, si se sigue estatizando a los clientes de Edelca va a llegar el día en el que nadie le pague y tenga que vivir del trueque. Así se convertirá en la primera empresa que se incorpora plenamente al socialismo del siglo XXI.
Es difícil imaginar a quién se le ocurrió tan gloriosa jalada, pero está claro que apunta bien, porque para nadie es un secreto que al Jefe le encanta que lo vean y lo escuchen. De modo que no cabe dudar del beneplácito que le producirá la iniciativa. Los aduladores han descubierto cuanto le gusta el culto a su persona y explotan esta debilidad sin ningún pudor. Produce vergüenza contemplar las expresiones exageradas de estos melindrosos aprovechados. Da la impresión de que no son creíbles, pero el Esclarecido, obnubilado desde su Olimpo, las recibe con aprobación y regocijo, le parece natural que exalten su genio y su talento. Se le hace imposible distinguir entre un lameculos y un revolucionario sincero y comprometido
A veces lo que cuesta es entender cómo no han empezado todavía a llenar el país de estatuas de nuestro Prócer y se contentan con exhibirlo sólo en vallas ¿Será por la proverbial incapacidad que siempre se les achaca a los colaboradores de nuestro Paladín?
Yo quiero proponer una cruzada de todas las fuerzas de la cultura revolucionaria que se dedique a tiempo completo a la construcción de una épica de nuestro Napoleón. A componer canciones, poesías, fábulas y leyendas. Se podría llamar como asesor a Pablo Milanés, que sabe mucho de estas cosas. Así podremos ensalzar la vida de nuestro Patriarca hasta convertirla en un verdadero objeto de culto.
Lo cierto es que los edelquianos se lo van a tener que calar desde que entren a la oficina hasta que se vayan. Pero lo que no van a lograr por esa vía es tener gente comprometida y generadora de ideas. Lograrán una empresa socialista, lo que es sinónimo de sumisa, pero nunca una gran empresa.
