El comercio: dimensiones de EE.UU. y México
El comercio total mundial de mercancías ascendió, en 1999, a más de 5,6 billones de dólares. Habiendo presentado, tal comercio, una tasa de crecimiento -a nivel de volumen-, de una cifra mayor a 4 % (porcentaje bastante parecido al de 1998). Medido así, el crecimiento del comercio fue mayor que el del producto bruto a nivel mundial, aunque la diferencia fue más pequeña que la observada en la mayor parte de los años noventa. En nueve años, de estos últimos, el comercio de mercancías creció en 4% o más, mientras la producción en ningún año creció a esa tasa y en varios lo hizo a menos de 2%.
Por su parte, los llamados servicios comerciales (transportación services, travel services, por ejemplo) alcanzaron un comercio total de alrededor de 1,3 billones de dólares, habiendo crecido tan sólo un 1,5%. En 1998, se había presentado un estancamiento en el comercio de estos servicios y, en 1997, el crecimiento había sido de 4%.
Dentro de los puntos de relevancia que ha habido en el comercio internacional de los últimos lustros, se encuentra el siempre señalado déficit comercial de EE.UU. Se ha relacionado, en algunas ocasiones, a la tendencia de tal economía a consumir más de lo que produce. Lejos quedó el llamado déficit comercial histórico que EE.UU. tuvo en el año 1987 (157.000 millones de dólares) cuando se lo compara con el presentado en 1999 (más de 350.000 millones de dólares) y que representa, por ejemplo, una cifra mayor a la exportaciones italianas o las que en conjunto realizaron las naciones latinoamericanas en el mismo año.
El impulso de las importaciones de EE.UU. y de los países asiáticos -que algunos llegaron a pensar que estaban derrotados y que, correspondientemente, se había acabado ese modelo de desarrollo- se encuentra en la base de la dinamización del comercio y la economía a nivel internacional durante 1999. En el caso de los países en desarrollo de Asia, debe señalarse que, como grupo, crecieron en alrededor de un 6%, destacándose, muy por encima del promedio, la República de Corea (los países más poblados de la región, China e India, crecieron en alrededor de un 7%).
Visto a la luz de la información que presenta la WTO (OMC) -o del procesamiento de la misma- en su Annual Report 2000, hay poco nuevo bajo el sol, cuando se trata de asuntos como los líderes del comercio. A nivel de exportaciones de mercancías, por ejemplo, en los primeros 10 lugares se destacan EE.UU., Alemania, Japón, Francia, Reino Unido (que representan alrededor de un 40% de las exportaciones mundiales para el año 1999), encontrándose solamente China como nación en desarrollo y con el puesto nueve. Ilustrativamente, puede indicarse que, Francia, con el puesto número cuatro, exporta mas que toda América Latina junta para el mismo año.
En los siguientes 10 lugares, hay cinco naciones en desarrollo del Asia y México (por América Latina) con 136.000 millones de dólares por concepto de tales exportaciones. Esta última cifra, representa a su vez, casi la mitad de las exportaciones latinoamericanas en el año 1999. Este último año fue, por cierto, el de peor desempeño económico promedio para los países de la región, medido por variación del producto (el crecimiento fue 0; o lo que es lo mismo que estancamiento), si se toma en cuenta toda la década de los noventa (ver Cepal, Balance Preliminar de la economía de América Latina y el Caribe 1999). Debe señalarse que, en la segunda mitad de los años noventa, después de la crisis de 1994, México tuvo un considerable impulso de sus exportaciones e importaciones. Ni este resultado, ni el rendimiento exitoso en otras variables, expresan, por cierto, el paraíso que algunos forzadamente ven en la nación azteca, aun con sus 40 millones de pobres y los 10 millones que han cruzado la frontera hacia EE.UU. Pero, debe indicarse, que, la crisis del año 1994, tampoco significaba el fracaso del llamado, antes de esta fecha, buen alumno del FMI. En el comercio y el desarrollo, las cosas son, realmente, más complejas que el tremendismo que se observa en variados enfoques.
En particular, puede señalarse, para la nación mexicana, que la misma ha alcanzado niveles de exportación de manufacturas de importancia. En su total de exportaciones, estas, ya han pasado a representar, sobre el 80% del mismo. La mayor porción de aquellas exportaciones está destinada al mercado de América del Norte. En otros países de América Latina, la exportación de manufacturas sigue representando el 40% ya conocido por los especialistas.
El que las cifras y el pragmatismo haya que tomarlas en cuenta, lo revela el que, el recientemente electo presidente de México, Vicente Fox, señala que las iniciativas mexicanas, en cuanto a la integración latinoamericana, tendrían como referencia fundamental a Brasil, Argentina y Chile para conformar una especie de cuarteto de arrastre.
