El Acuerdo de complementación económica con Colombia ¿Una salida honrosa?
Antecedentes
Venezuela no es miembro fundador del Acuerdo de Cartagena, su ingreso se da en 1973, precisamente 4 años después de su fundación (1969); si se hace un poco de memoria se puede recordar que el Dr Rafael Caldera cuando tomo la decisión de incorporarse al incipiente esquema de integración lo tuvo que hacer por la vía de la adhesión y no conto con el apoyo empresarial, las principales agrupaciones, se mostraron en contrario bajo el argumento de que el aparato industrial no se encontraba en condiciones de entrar a competir con economías como la chilena y la colombiana. El Acuerdo de Cartagena conocido en ese momento como Pacto Andino tenía como objetivo el establecimiento de una Unión Aduanera por lo que se tendría que entrar en negociaciones para eliminar en todas las barreras arancelarias y para arancelarias a todos los productos de los países miembros y negociar el establecimiento de un Arancel Externo Común lo cual era algo sumamente complicado y complejo.
Los gobiernos subsiguientes y las políticas económicas y de desarrollo industrial permitieron en el transcurso del tiempo que nuestro aparato productivo se convirtiera en uno de los motores de la Comunidad Andina y hacer de Colombia nuestro principal socio. Hoy es posible hacer una análisis comparativo de los últimos 20 años y encontramos que con algunas excepciones Venezuela siempre tuvo una balanza comercial a su favor. Para 1997 el volumen comercial llego a 2.582.022 Mill $ (cifras CAVECOL) de los cuales a Venezuela le correspondieron exportar 1 559 033 Mill $ versus 990 Mill $ de Colombia; mientras que durante los 10 años siguientes la balanza se ha invertido con una resultante favorable a Colombia en un comercio situado en los 6.576.000 Mill de $ de los cuales Venezuela solo exporta al vecino país 1.366.000 Mill$ mientras que de Colombia importamos 5.210.000 Mill$. Es decir nuestras exportaciones están por debajo de hace 10 años con el agravante que si se analiza la composición de estas importaciones se pone en duda nuestra soberanía alimentaria.
La Denuncia.
Con esta introducción se puede pensar que la política hacia Colombia no ha sido la más adecuada ya que en lugar de fortalecer las relaciones no solo con un país hermano, se ha perdido la oportunidad de fortalecerlas con un socio comercial real y verdadero, donde existen múltiples intereses comunes que es lo que buscan los países; El gobierno de Venezuela, a través de un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores, fechado 22 de abril del año 2006, formalizó su Denuncia al Acuerdo de Cartagena, argumentando su oposición a la firma los TLC´s, por parte de Perú y Colombia con los Estados Unidos de Norteamérica.
El Artículo 135 del Acuerdo de Cartagena, precisa que a partir de la comunicación de la denuncia cesan para el denunciante los derechos y obligaciones derivados de su condición de miembro, con excepción de las ventajas recibidas y otorgadas de conformidad con el Programa de Liberación de la Subregión, que permanecerán en vigencia por un plazo de cinco años a partir de la denuncia. Es decir para abril del próximo año el gobierno deberá haber negociado algún instrumento que regule las relaciones comerciales entre ambos paíse vista las necesidades complementarias que tienen ambas economías.
¿ Una salida honrosa ?
El reciente encuentro entre los presidentes de Venezuela y Colombia el pasado 2 de noviembre en Caracas, representa una luz en este túnel en que se encuentran las relaciones bilaterales. Según la declaración conjunta de Miraflores las partes se comprometieron en crear un Comité Binacional Económico-Productivo, cuyo objeto será avanzar en el acuerdo de Complementariedad Económica y Productiva (ACE), como vía de respuesta y solución a medias de los problemas derivados de la decisión inconsulta de salirse de la CAN.
La negociación y firma de un Acuerdo de Complementación Económica (ACE) en el marco de la ALADI, es el equivalente en la terminología anglosajona a un Tratado de Libre Comercio (TLC). La posición del gobierno en las negociaciones económicas internacionales ha sido la de oponerse a los TLC, como sucedió con el ALCA en la III Cumbre de las Américas en Quebec 2001, con el argumento de la existencia de profundas “asimetrías”; posteriormente en reafirmación a esa política en abril del 2006 como se señalo anteriormente, se denuncia el Acuerdo de Cartagena, como respuesta al TLC entre Colombia y los EEUU; al mes siguiente el 22 de mayo anuncia oficialmente la desincorporación del Grupo de los Tres integrado por México , Colombia y Venezuela. En esta oportunidad el propio Presidente reconoce la similitud entre los ACE y los TLC al expresar en el texto oficial “‘Lejos de representar un acuerdo de complementación, como lo expresa su enunciado, nos encontramos con un Tratado de Libre Comercio.“
Todo hace pensar que Colombia hará uso de su poder negociador y su posición de fuerza en estas negociaciones para lograr las mayores ventajas y condiciones para sus productos y exportaciones. En cambio Venezuela se encuentra en una posición muy desventajosa, tanto desde el punto político como económico y comercial. Colombia hasta la fecha ha negociado (12) acuerdos de Complementación Económica; (7) Acuerdos de Alcance Parcial ;(6) Acuerdos de Libre Comercio – tres de ellos a la esperan la aprobación legislativa entre estos el de los EE.UU -; (1) Acuerdo de Unión Aduanera y negocio su ingreso a la OMC ; lo cual representa una gran experticia y capacidad en este tipo de negociaciones y de las cuales Venezuela en estos momentos adolece: Con esta experiencia es de esperarse que la propuesta de Colombia para negociar un ACE será sumamente liberal sin restricciones ni reservas al libre comercio, lo cual es antagónico y contradictorio con el discurso político que el gobierno de Venezuela ha mantenido hasta la fecha. Lo lógico y lo sensato luego del encuentro con Santos en Santamarta y de las invocaciones a la memoria del Padre Libertador era regresar a la CAN lo cual en términos políticos hubiera sido más beneficioso y en términos económicos menos costoso.
Conclusiones
En conclusión la negociación de un Acuerdo de Complementación Económica requerirá en primer término de una aceptación más amplia del concepto de soberanía, para poder lograr posiciones comunes en un juego ganar – ganar; por razones muy simples, Colombia viene con posiciones y demandas para el libre comercio en temas como Trato Nacional, Acceso de Bienes al Mercado y Reglas de Origen; modificación de los Impuestos a las Importación y exportaciones; cambio de políticas en sectores vitales como el automotor y agropecuario; erradicación de los regímenes de Salvaguarda a las Prácticas Desleales de Comercio Internacional y a los subsidios de las exportaciones, lo cual significara un cambio de Philosofia en la teoría política del gobierno y un reconocimiento a la existencia de un mundo globalizado, del libre comercio y libre mercado
PH D
Embajador de Carrera
Ex Director General Economía y Cooperación Internacionales
Ministerio Relaciones Exteriores